Hoy 8 de marzo de 2024, caminando hacia los Idus de marzo , el gobierno sanchista nos esta intentando tapar los desmanes del gobierno, Ley de Amnistía incluida, con diversas cortinas de humo y hacernos perder el tiempo con unos chorizos notables pero de importancia relativa frente a los miles de muertos que pudo evitar si hubiese reaccionado con antelación, ante las primeras señales que anunciaban lo que se nos venía: una pandemia como no habíamos sufrido desde la mal llamada gripe española; hacía 100 años. Esta actuación negligente estaba cargada y emponzoñada de razones políticas y feministas, carecer de un equipo de expertos y haber dejado en el cajón el plan de actuación frente a pandemias del gobierno de Mariano Rajoy, bien conocido por el entonces gurú de Pedro Sanchez, Iván Redondo. Efectivamente, Mariano Rajoy, tuvo que hacer frente a la crisis por el virus del ébola, no sin críticas del propio Sánchez y su entonces vicepresidente Pablo Iglesias desde la oposición y fue precisamente el dirigente popular quien incluyó las bases de un plan de actuación frente a posibles epidemias y pandemias en la Estrategia de Seguridad Nacional que se aprobó en diciembre de 2017, seis meses antes de ser depuesto en la moción de censura de Pedro Sánchez. Ley que se mantiene en vigor a día de hoy. Tener una respuesta ante este tipo de amenazas eran uno de los objetivos del Gobierno en cuanto a seguridad nacional, sobre todo teniendo en cuenta la vulnerabilidad de nuestro país por la cantidad de turistas que recibe anualmente, 77 millones, por tener algunos de los puertos y aeropuertos con mayor tráfico del mundo, Pero el gobierno sanchista lo ignoró olimpicamente y eso que Ivan Redondo y el famoso Fernando Simón, como director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad (CCAES), lo conocían. Puesto por el gobierno anterior y aún sigue.
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El 31 de enero de 2020 decÍa:"España no va a tener, como mucho, más allá de algún caso diagnosticado" |
Habíamos tenido ocasión de aprender de las crisis anteriores pues la humanidad ha sufrido una larga serie de pandemias que periódicamente asolaban la población, como se reflejó en El Decamerón de Boccaccio. La obra comienza con una descripción de la peste bubónica (la epidemia de peste negra que golpeó a Florencia en 1348), lo que da motivo a que un grupo de diez jóvenes (siete mujeres y tres hombres) que huyen de la plaga, se refugien en una villa en las afueras de Florencia. Otro libro, actual, que relata la misma pandemia es Un Mundo sin fin de Kent Follet, que hace referencia a la peste negra , tanto en Florencia como en Inglaterra. Eduardo III perdió una hija por esta peste negra, Juana de Inglaterra, cuando iba camino de Castilla para casarse con el entonces príncipe Pedro, luego Pedro I el cruel. Tan demoledora fue esta peste que durante el año de mayor virulencia, 1348, se firmó una tregua en la Guerra de los Cien Años. Llegó a diezmar a la población mundial. Otro libro famoso fue el Libro de la peste sobre la de Londres de 1665 (Escrito por Daniel Defoe.pero nuestro gobierno y su inexistente equipo de asesor, no lo consideraron necesario y el resultado fueron 150.000 fallecidos y millones de afectados que superaron la enfermedad y muchos de los cuales sufrieron y aún sufren secuelas. Un ejemplo cercano lo tuvimos a cuenta de la mal llamada gripe española.
Cuando llegó a la ciudad de Filadelfia, no se le dió importancia y no se canceló su más famoso desfile, ni se cerraron locales comerciales hasta una semana después de su celebración; un símil que me recuerda a la actuación del gobierno español con la manifestación del 8M y la tardía declaración de alarma con el enclaustramiento poblacional. Ojo, que teníamos de ejemplo la situación Italiana, pero aquí para nuestras autoridades, era como con la colza, un bichito sin importancia que mataba menos que la gripe estacional. Nada de prever mascarillas y que decir de pruebas selectivas.
En Saint Louis, la actuación consistió en medidas de aislamiento social, cerrar iglesias, escuelas, bailes,..., consiguieron reducir los contagios y los fallecimientos, que fueron ocho veces menores que en Filadelfia, donde despreciaron al bichito. El ejemplo de Saint Louis, en el Covid 19, lo siguieron Taiwan, Corea del Sur y parecido en Alemania. En España, con más de un mes de retraso, se planteó el gobierno hacer pruebas a quienes presenten síntomas y así mientras que en Corea, se realizaban 15.000 pruebas diarias, aquí llevabamos menos de 40.000 en un mes. Los análisis masivos de Corea no son ningún milagro, sino la experiencia aprendida del coronavirus, SARS en el 2003, que sacudió la economía coreana. Así, cuando allí llevabann 8400 contagios y 84 fallecidos, en España llevábamos 14.000 contagios y 560 muertos y Alemania 10.000 contagios y 26 fallecidos. Algo haciamos mal: la improvisación y valorar más interes políticos que sanitarios. Las celebraciones femenistas del sector podemita del gobierno y de la ministra Carmen Calvo, del 8 M eran lo prioritario. Ellas se llevaron el éxito parcial, pues bajó la asistencia frente al año anterior; el resto se comió las muertes que se pudieron minimizar.
Vídeo en el que la ministra reconoce el miedo al Covid-19: a una periodista de ETB en la previa de una entrevista para el programa de actualidad política «En Jake» Pincha en el enlace adjunto
Periodista: ¿A qué crees que se debe la bajada de cifras?
Irene Montero : Pues tía, creo que al coronavirus [...] No lo voy a decir pues porque no lo voy a decir.
El 31 de diciembre del año anterior, 2019,las autoridades de la República Popular China informaron de un brote de neumonía inusual en un mercado de pescado de la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei. Luego vimos como construían mega hospitales. Para mayor abundamiento, recordar que el primer positivo por coronavirus en España fue detectado el 31 de enero, mes y medio antes del confinamiento; un retraso letal. Se trataba de un turista alemán que se contagió en su país antes de viajar a La Gomera, donde fue aislado en un hospital de la isla canaria. Ese mismo día, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, afirmó que “España no va a tener, como mucho, más allá de algún caso diagnosticado [de coronavirus]” Por aquellas fechas, y mientras el Gobierno trataba de minimizar la magnitud de la epidemia, el CSIC ya estaba involucrado en proyectos de investigación del coronavirus. “En enero de 2020, tras una reunión del equipo de dirección del CSIC con la dirección e investigadores del Centro Nacional de Biotecnología (CNB)”, según señala el documento, “se acordó lanzar con carácter inmediato un proyecto con financiación propia apoyando la línea de trabajo del laboratorio de coronavirus del CNB”, liderado por los doctores Luis Enjuanes e Isabel Sola.
El responsable policial de prevención de riesgos laborales, José Antonio Nieto, recomendó el 24 de enero "evitar aglomeraciones". El entonces responsable policial firmó una instrucción en la que se realizaban las primeras recomendaciones para los funcionarios que estuvieran en zona de riesgo, en fronteras aéreas. Es decir, en los aeropuertos. Recomendaba a los agentes que intervinieran en el control de llegadas de vuelos procedentes de China que usaran guantes de nitrilo y mascarillas FP2, y recomendaba que "se eviten aglomeraciones". Pese a que le llegaron mensajes de lo molesto que estaba el Gobierno y consejos para que rebajara la alarma, mantuvo las recomendaciones y liberó 300.000 euros con los que adquirió 14.000 mascarillas y 22.000 pares de guantes para los agentes en puestos de más riesgo. En marzo fue cesado por exceso de celo
Desde la Edad Media, el principal y a menudo único sistema de enfrentarse a las pandemias era con medidas individuales de protección y confinamientos. Pero nuestro pésimo gobierno se retrasó inexplicablemente, desde el punto de vista sanitario. Varias semanas más tarde, el 14 de febrero, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, afirmó que con las medidas ¿adoptadas hasta ese momento? para hacer frente a la pandemia “es más que suficiente”. El 25 de febrero, tras detectarse los primeros contagios en la Comunidad de Madrid y Cataluña, todos relacionados con el virulento foco de Italia, Illa pidió “no caer en alarmismos”. Y añadió que “no es necesario ir con mascarillas por la calle”. Y el 28 de febrero, ya con 30 casos registrados en España, el Gobierno decidió seguir manteniendo el escenario de “contención”, pese a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) había elevado el riesgo de expansión de “alto” a “muy alto”. En España hubo quien se preparó y le fue bien, como en 4 residencias de mayores.
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Residencia de mayores con cero contagios por confinarse, con sus cuidadores desde finales de febrero
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Sin embargo, varias semanas más tarde, cuando el coronavirus afectaba ya a 10 comunidades autónomas, el Ministerio de Sanidad seguía descartando la anulación de eventos o la restricción de la libertad de movimientos porque ello traería “consecuencias muy gordas” (sic), según dijo entonces Simón. El documento elaborado por el CSIC advierte de que la situación generada por el Covid-19 “comienza a ser muy preocupante en la semana del 9 de marzo, especialmente en la Comunidad de Madrid”. Un día más tarde, el 10 de marzo, el Gobierno adoptó, como única medida reseñable, la anulación de todos los eventos en espacios cerrados de más de 1.000 personas
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8M de 2020. El infectódromo. |
Lo cierto es que el gobierno fracasó en lo que era su responsabilidad, la protección de nuestras vidas, pues nos aplicó la fábula de la zorra y las uvas. Como no tenía mascarillas, no era necesario llevarlas y cuando las tuvo, resultaron obligatorias. Con el confinamiento de la semana posterior, se apalanó la curva y comenzó la desescalada, que funcionó gracias a las mascarillas obligatorias, distancia social e higiene de manos. Haber aplicado esas medidas desde el 3 de marzo, en lugar del día 15 (14+1) de los 9.000 contagiados diarios a finales de marzo, habrían disminuido su número de forma notable. Hay estudios que rebajan la mortandad a menos de la mitad.Tampoco habría hecho falta confinar a toda la población, habría sido suficiente con hacerlo a los mayores de 60 años y no haber estrangulado la economía.
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Si no había peligro, ¿por que se protegían con guantes?
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Si solo un par de días o tres antes del fatídico día 6 se hubiesen prohibido o desaconsejado las reuniones, en lugar de hacerlo el 15 pues se habrían evitado reuniones numerosas como los 200.000 asistentes a las manifas; más de 100.000 en diversos partidos de fútbol; 10.000 en la Asamblea de Vox de Vistalegre y 670.000 en los más de 1200 funerales que se celebran diariamente en España a razon de 40 personas, que se abrazan y besan * 1200* 14 dias. Recordemos que en el funeral Alavés se contagiaron 63 personas.
A 31 de marzo, con datos del DSN, las muertes en Europa eran: Italia (11.591), España (8.189), Francia (3.024), Reino Unido (1.408), Países Bajos (864), Alemania (583), Bélgica (513), Suecia (146), Portugal (140), Austria (108), Dinamarca (77), Irlanda (54), Rumania (44), Grecia (43), Polonia (31) , Noruega (26), República Checa (24), Luxemburgo (22), Hungría (15), Finlandia (13) y Eslovenia (11). Como puede verse, éramos el segundo pais en total de fallecidos y disputando el primero a Italia, en función de sus poblaciones.
Ahí puede hacerse una aproximación a los muertos evitable, simplemente adelantando esos 12 días las medidas. Además haber adelantado las compras de mascarillas y material sanitario habría sido más fácil y económico. En resumen: el gobierno podría haber evitado la muerte de miles de españoles; de un gasto desmesurado de dinero y encima ahora estamos conociendo que varios miembros del gobierno, se enriquecieron ellos mismos o facilitaron el enriquecimiento de terceros entre sus afines. Eso si, con la previsible aprobación de la Ley de Amnistía, el gobierno pasará a la historia como el salvador de los golpistas y el por el perdon a los defraudadores que nos saquearon en plena pandemia.
https://elcriticonhistorico.blogspot.com/2020/03/aprendiendo-de-la-gripe-espanola-y.html