El pasado 31 de octubre de 2017, se cumplieron 100 años de la importante batalla de Beerseba, durante la 1ª G.M; ciudad situada a 110 km al sur de Tel Aviv en pleno desierto del Neguev; con su famosa carga de caballería. Los héroes de la inesperada carga, que sorprendió a los soldados turcos y sus asesores alemanes, fueron los diggers, la Caballería Ligera Australiana comandada por el general William Grant que, en aquella ocasión, en lugar de actuar como la infantería a caballo que eran (desmontaban cerca del enemigo y actuaban como infantería), pasaron al galope sobre las trincheras enemigas con los fusiles a la espalda y blandiendo sus bayonetas a modo de espadas.
Celebración del centenario en Beerseba |
Según las crónicas de la época, fueron 800 jinetes contra más de 4.000 hombres armados con fusiles que los esperaban parapetados tras 60 ametralladoras y 28 cañones. Esta victoria abrió las puertas a la conquista de Jerusalén y Damasco y facilitó la entrada triunfal del general británico Edmund Allenby en la historia de Oriente Medio. Este general se dio conocer al público con la famosa película Lawrence de Arabia. Nuestra batalla de Beerseba sirvió como tema para la película Jinetes de Leyenda.
Jinetes de leyenda, 1987 |
Esta batalla es considerada, por los ingleses y australianos, como la última carga de caballería, victoriosa, en la guerra moderna; pues la carga de la caballería polaca contra los panzer alemanes en septiembre de 1939 no fue tal y desde luego terminó en derrota. Este comentario del artículo de El País no es cierto pues olvida una carga, igualmente exitosa, en nuestra guerra civil, la ofensiva del Alfambra en febrero de 1938. En esta ofensiva desempeñó una gran labor de ruptura y envolvimiento la División de Caballería del general (realmente coronel) Monasterio; con seis regimientos a caballo, cada uno con cuatro escuadrones de sables y uno de ametralladoras; en conjunto una masa de más de 3.000 hombres.
Esta ofensiva, por el norte de Teruel, fue el inicio de la reacción del ejército franquista a la toma de Teruel por el ejército popular el 7 de enero y se inició el 5 de febrero por una fuerza atacante de 100.000 hombres, incluidos los de la 1ª División de caballería. El frente estaba defendido por menos de la mitad de soldados republicanos pues después de la toma de Teruel, se retiraron las fuerzas del ejército de maniobra. En este primer empujón, el frente se dislocó y la caballería llegó el 8 de febrero al río Alfambra y así quedó abierta la herida por donde posteriormente se recuperaría Teruel por las tropas de Franco. Se hicieron más de 7.000 prisioneros, de los cuales se debieron casi la mitad a la caballería.
Los ingleses y australianos tan amigos de engrandecer su historia y nosotros incapaces de enaltecer nuestra historia; aunque desgraciadamente esta batalla tuvo como principales oponentes a españoles, lo cual le añade más valor a la carga que se realizó contra soldados tan españoles como los atacantes; soldados aguerridos y que un mes antes habían sido los vencedores de su ofensiva sobre Teruel; única capital de provincia ganada por el ejército republicano después del levantamiento de julio del 36.
Esta ofensiva, por el norte de Teruel, fue el inicio de la reacción del ejército franquista a la toma de Teruel por el ejército popular el 7 de enero y se inició el 5 de febrero por una fuerza atacante de 100.000 hombres, incluidos los de la 1ª División de caballería. El frente estaba defendido por menos de la mitad de soldados republicanos pues después de la toma de Teruel, se retiraron las fuerzas del ejército de maniobra. En este primer empujón, el frente se dislocó y la caballería llegó el 8 de febrero al río Alfambra y así quedó abierta la herida por donde posteriormente se recuperaría Teruel por las tropas de Franco. Se hicieron más de 7.000 prisioneros, de los cuales se debieron casi la mitad a la caballería.
Equipamiento de la caballería de la 1ª División de Monasterio |
No hay comentarios:
Publicar un comentario