martes, 5 de junio de 2018

TRISTE DÍA EN QUE SE VA UN HOMBRE CABAL POR LA FELONÍA DE OTRO

Hoy 5 de junio es un día triste para millones de españoles pues se despide de la política activa un hombre cabal, tras cerca de 40 años dedicado a la vida pública, entendida como servicio. Empezó de simple militante y pasando por muchos escalones llegó a presidir el Partido Popular durante estos últimos 14 años, compatibilizando seis con el puesto de máxima responsabilidad: Presidente del Gobierno de España. Cuando llegó se encontró una economía al borde del desastre y ahora la entrega ocupando el 13/15 puesto


Muchos de ellos porque tras la peor crisis de nuestra democracia han encontrado un puesto de trabajo, aunque no sea tan lustroso como en la etapa anterior. Tambien habrá millones que se alegraran; no faltaría más en la España cainita:
Españolito que vienes al mundo, te guarde Dios. Una de las dos Españas ha de helarte el corazón.
Lógicamente no siempre ha acertado, es humano, pero ha mantenido la serenidad que algunos han llamado cachaza, en los momentos más duros como durante el golpe de estado de Puigdemont y Cia. Efectivamente debería haberlo abortado cuatro años antes y/o haber rescatado los artículos del Código Penal que Zapatero (PSOE) derogó y que Aznar había introducido como freno a los separatismos. El independentismo catalán avivado por Zapatero que se equivocó gravemente como lo demuestra la entrevista con Pedro J. Ramirez en abril de 2006.  Frente a la inicial oposición de Sanchez y Rivera al 155, Rajoy lo puso en marcha pero consintió la petición de Sanchez de no incluir a TV3. Este 155, blando, paró el golpe pero las precipitadas elecciones dejaron la situación parecida a la anterior, con un Govern que insiste en ir a la secesión; pero cuyos votos ha aceptado Pedro Sanchez para su asalto al poder.
Solo hace quince días, el propio Mariano Rajoy decía publicamente que Pedro Sanchez se había vuelto un hombre de Estado y su comportamiento en el problema catalán estaba mostrando lo mejor de sí. Desgraciadamente para Rajoy pero afortunadamente para Sanchez, que no paraba de bajar en las encuestas, salta el caso Zaplana seguido por la sentencia del caso Gürtell con la condena, civil, al partido por beneficiarse de unos dineros cuyo importe es escaso y además se reconocía un aprovechamiento sin consentimiento. También se dudaba de la veracidad de las declaraciones del propio Rajoy. Olvidando que la sentencia no es firme, el olor a sangre fresca hizo afilar los dientes a Rivera (que se planteaba seguir apoyando a Rajoy solo unos días después de su apoyo a los presupuestos), a Pablo Iglesias y al, hasta ese momento, moderado Sanchez; que fuera de sí se lanzó a presentar una moción de censura, en la búsqueda impúdica de su sillón presidencial. A su habitual falta de principios, mejor dicho a sus muchos principios a imagen de Groucho Marx, se suma ahora la falta de vergüenza y desmemoria presentando la referida moción, incluso antes de la firma de todos los componentes de la ejecutiva. Tampoco los diputados fueron consultados.


La maniobra de Sánchez vulnera las buenas prácticas democráticas, porque el recién nombrado presidente ha sido rechazado las dos veces que se ha presentado ante los votantes españoles, la última hace solo un par de años, cuando fue vapuleado con el peor resultado del PSOE en la historia reciente. Si mañana mismo se sometiese al escrutinio de los votantes volvería a perder, por lo que tiene algo de fraude que llegue por un atajo retorcido en lugar de aceptar nuevas elecciones. Por último, su palabra es quincalla: ¿Es fiable un político que hace quince días decía que los presupuestos de Rajoy le provocaban urticaria y que ahora los adopta para pagar al PNV su traición a su anterior socio?¿Es fiable un político que hace no mucho tiempo decía que no pactaría con Podemos y demás populismos?

Esta actuación ha creado mucho cabreo e indignación que se alimenta con las amenazas de los dirigentes del PNV y excesiva alegría de los podemitas que celebran la dimisión de Rajoy como un éxito y se enorgullecen de haberlo echado; términos en línea con nuestro cainismo. Sanchez aprovechará su corto gobierno, máximo dos años, para preparar las próximas elecciones generales e intentar volver a repetir como Presidente con el apoyo de las urnas y no de forma torticera. Muchos de los hoy tristes, esperan conseguir que España no pague a felones que se coaligan con sus más sañudos enemigos e incluso apuñalan por la espalda al contrario. El fin no puede justificar los medios y aprovecharse de lo pactado por el PNV con el PP para acuchillar a este, es una impudicia o felonía (deslealtad o traición).

Para terminar esta artículo, nada mejor que el elogio de alguien, Pablo Iglesias, en las antípodas de su ideología, que ha resaltado la habilitad política de Rajoy, con quien siempre tuvo buena relación a pesar de las enormes diferencias políticas y contra quien le gustaba debatir en el Congreso. "Se retira un político elegante e inteligente que sabía escuchar. Fue un honor ser su rival y combatirle políticamente. Se ganó mi respeto", dice Iglesias.




2 comentarios:

  1. Zapatrenes no sólo no se equivocó, sino que lo hizo a propósito.

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  2. El daño se neutralizó en gran medida pero Sanchez terminará de abrir hueco en nuestra unidad.

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