jueves, 14 de septiembre de 2023

CENTENARIO DEL GOLPE DE ESTADO DE PRIMO DE RIVERA

En línea con el sentido de este mi blog, nuevamente la casualidad me pone en bandeja este artículo. Coincidencia porque mientras entre el 11 y el 15 de septiembre de 1923 se concretaba el golpe de estado, no violentp, por el Capitan General de Cataluña, con la aquiecencia del rey Alfonso XIII. Ahora 100 años después estamos viendo como el gobierno acusa al ex-presidente Aznar de golpista por defender que la ciudadanía debe salir a la calle a protestar por el intento del gobierno de pactar la continuidad en Monclo con un prófugo de la justicia, por golpista en 2017, y buscador de romper la unidad de España con volver a intentar la secesión de Cataluña. Ese pacto anti natura lleva consigo una exigencia de amnistía o similar que es percibido como un intento gubernamental de modificar, por la puerta de atrás, la Constitución de 1978. Hace 100 años, la que fue suspendida era la vigente desde 1876, tras 47 años de vida (dos más que la actual). Entre medias se pone en la cuerda floja la continuidad del actual rey, Felipe VI bisnieto de Alfonso XIII. El golpe de D. Miguel Primo de Rivera, fue apoyado y deseado por la burguesía catalana y sectores capitalistas e industriales que veían en él al "cirujano de hierro"deseado por Joaquín Costa como el que resolvería los problemas que aquejaban a España. Costa fue un político, jurista, economista e historiador español y el mayor representante del movimiento intelectual conocido como regeneracionismo.



Para entender el golpe de estado, hay que mirar los 30 años anteriores, 1893, que habían sido tremendos pues de forma sucinta recordaremos Alfonso XIII enterró a tres de sus jefes de gobierno, asesinados por anarquistas, Cánovas del Castillo en 1897; José Canalejas en 1912 y Eduardo Dato en 1921. El rey sufrió varios atentados, uno el día de su boda en Madrid en 1906; otros dos en 1878 y 1879 y así hasta nueve, incluyendo el fallido de Francesc Macia en 1925. No podemos olvidar la guerra de Cuba y Filipinas que terminó, en 1898, con la pérdida de ambas y el adios a la España Imperial. Guerras con más de 50.000 españoles muertos y muchos más afectados por enfermedades tropicales. Estas pérdidas son el origen de los nacionalismos vasco y catalán, que despreciaban a los otros españoles que no fueron capaces de defender sus intereses azucareros y de licores.


                   


Otro momento de gravedad fue la conocida como Semana Trágica en Barcelona y otras ciudades de Cataluña entre el 26 de julio y el 2 de agosto de 1909; enfrentamientos viiolentos por el decreto del gobierno de Antonio Maura de enviar tropas de reserva a la Guerra de Melilla, con regimientos nutridos con abundantes padres de familia. En esas fechas se produjo la masacre del Barranco del Lobo. Los enfrentamientos entre particulares y propietarios e industriales catalanes con el ejército, responsable de sus pérdidas económicas, originó insultos como la revista satírica Cu-Cut y su asalto y destrucción por oficiales de la guarnición.


Se vivió una época de bonanza gracias a la Iª G.M. que nos permitió grandes ventas de minerales, comida y textiles a los litigantes pero abrió la puerta al comunismo y al trienio bolchevique de 1917 a 1920. Terminada la guerra, el paro volvió con virulencia y los campesinos que vinieron a las ciudades a trabajar en la industria, se quedan sin futuro. Huelgas violentas sofocadas por la guardia civil y el ejército en funciones de garantes del orden público. Nacieron y se consolidaron los grandes sindicatos UGT y CNT. Los pistoleros obreros y patronales campaban a sus anchas y los muertos abundaban. Por supuesto la derrota de Anual en 1921 con más de 10.000 muertos fue otro aldabonazo contra el gobierno y el Rey soldado, como le gustaba ser considerado a Alfonso XIII.

Ante ese desbarajuste, convencieron facilmente a Miguel Primo de Rivera de ser el cirujano de hierro y efectivamente declaró ilegal al sindicato anarquista CNT, en connivencia con Largo y la UGT. Acabó con la guerra de Marruecos en mayo de 1927. Contuvo la violencia con aplicación de la llamada ley de fugas y violencia policial en manos del general Martinez Anido. Creó las Confederaciones Hidraúlicas que aún tenemos; dió un gran impulso a las carreteras y obras hidráulicas; Consiguió crear Telefónica a salvo del capital extranjero; Firmó acuerdos de combustible con Rusia y soportó las presiones sobre CAMPSA; contuvo la inflación que nos golpeó en menor medida durante la Gran Depresión. Mantuvo acuerdos con los sindicatos en especial con la UGT de Largo Caballero en mesas sectoriales. Ante los intentos secesionistas catalanes, el 20 de abril de 1925, el Gobierno del Directorio Militar, ordenó la disolución de la Mancomunitat de Catalunya. Constituía el 6 de abril de 1914 en el Palau de la Generalitat con Enric Prat de la Riba, como primer President. La diabetes de Primo de Rivera se agravaba y sintiendo que perdía el apoyo del Rey así como el de principales militares, soportó un golpe, La Sanjuanada, se exilió a Francia el 28 de enero de 1930;  muriendo dos semanas más tarde.
          

Hemos pasado por un ensayo de ese especial regionalismo con la mancomunidad de Cataluña, y él ha conducido a tal grado de mal entendido predominio del sentimiento regional que, contra lo que se decía de que era convivible con el de la Patria grande, lo hemos visto galopar desenfrenadamente hacia el nacionalismo y el separatismo, haciendo pasar a los catalanes amantes de España horas de amargura y humillación, y a los españoles todos de inquietud y descorazonamiento.  

Seguimos sin aprender y cien años después, asistimos a una nueva crisis política por violación e incumplimiento de la Constitución. La Transición, a diferencia de la II República, se concibió como un sistema de centro, inclusivo y moderado. Un sistema que se soporta en tres pilares: la Corona, la socialdemocracia y el centroderecha. Si falla uno de esos tres sustentos del edificio, este se derrumba. Los políticos españoles harían bien en aprender de la experiencia y considerar que no sale gratis contradecir el espíritu y la letra de la Constitución. Hacerlo tendrá consecuencias no sólo para la élite política, como en 1923, sino para el conjunto de los españoles. Por ello, no basta con denunciar el golpismo anticonstitucional desde el gobierno en funciones. Nos afecta a todos y es preciso, como dice Alfonso Guerra, "actuar, rebelarnos". Quien lo diría, opina igual que Aznar.

4 comentarios:

  1. Olé criticòn. Perfecto lo expresado . No aprendemos con estos cagalanes , con g, para diferenciar los otros . Cagalunya . Caganets . Cagarreta
    Los catalanes con “t”. ¡ venga ,venga! . Muy bien criticòn leerte es un placer .

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    1. Muchas gracias. El rey Alfonso XIII no se opuso a Primo de Rivera y terminó cayendo con él. Veremos como actúa el bisnieto frente a este golpista de verbena, Pedro Sánchez.

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    2. Canción que cantaban las niñas españolas en sus corros infantiles en los años 20 y 30: En el Barranco del Lobo, hay una fuente que mana, de la sangre de españoles, que murieron por su patria

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    3. La sabiduria popular que bien refleja la realidad.

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