Hay mucha ignorancia, complementada con inoportunidad, en la visita de Pedro Sánchez a Vietnam en el 50 aniversario de la caida de Saigón, 30/04/1975 (desde entonces ciudad Ho Chi Ming, en recuerdo del lider muerto 6 años antes); resumida en la imagen de la huida de civiles aterrorizados, desde la terraza de un edificio frente a la embajada americana en Saigón; hasta entonces capital de la República de Vietnam del Sur. La gente asaltaba los helicópteros que eran su única esperanza de salir del país y evitar las represalias que se temían con la ocupación, de la que se tenían las peores referencias por la experiencia de la ocupación de Hué por el Vietcong y fuerzas norvietnamitas, durante un mes en el año 1968 durante la ofensiva del Teth. Después de ser expulsados y reconquistada la ciudad, las tropas estadounidenses y survietnamitas encontraron fosas comunes y decapitaciones. Un estudio indicó que los comunistas se habían ensañado con oficiales del ERVN, católicos, intelectuales y empresarios, así como otros supuestos contrarrevolucionarios.
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Sanchez rinde homenaje a Ho Chi Ming |
Días antes de que cayera Saigón y con la guerra en sus estertores, se llevó a cabo una evacuación masiva de diplomáticos y personal de apoyo estadounidense, ciudadanos extranjeros y refugiados vietnamitas (incluyendo a dos mil huérfanos vietnamitas durante la Operación Babylift). En la improvisada «Frequent Wind» se evacuó a 1373 estadounidenses y a 5595 vietnamitas y de otras nacionalidades en helicóptero. A medida que se acercaba el inminente colapso del frente, la Task Force 76 de la 7.ª Flota de Estados Unidos se reunió frente a las costas de Vũng Tàu para apoyar la evacuación y brindar apoyo aéreo si este fuera necesario. Durante la evacuación no fue necesario el apoyo aéreo, debido a que los norvietnamitas detuvieron su avance durante unas semanas a las afueras de Saigón, con el fin de evitar una confrontación directa con Estados Unidos, que habían retirado sus tropas de combate dos años antes, al permitir la evacuación estadounidense sin apenas oposición y a la espera de que el gobierno de Vietnam del Sur colapsase por sí solo. Hubo pilotos del ejército del aire survietnamita que huyó con su familia al secuestrar helicópteros que ellos mismos pilotaron hasta Tailandia o los portaaviones americanos fondeados cerca de la costa. Muchos helicópteros fueron arrojados al mar desde las cubiertas para dejar espacio a los que llegaban, otros descargaban y una vez vacios se posaban en el mar. ¿Este recuerdo penoso y en muchos casos vergonzoso es lo que pretendía reavivar Sánchez?. Esperemos queno, en nuestro bien.
helicóptero arrojado al mar para hacer sitio en la cubierta para otros que llegaban |
Para mayor inoportunidad del viaje de Pedro Sánchez, alabando dictaduras y genocidios, recordar que simultáneamente con el final de la guerra de Vietnam, la salida de los Estados Unidos y el derrocamiento del general Camboyano, Lon Nol (que regía una dictadura militar desde 1970), los Jemeres Rojos de Pol Pot, tomaron el poder el 17 de abril de 1975 con la «Caída de Phnom Penh». Otro recuerdo que cumple 50 años. Fundaron la Kampuchea (Camboya) Democrática; un sistema de Gobierno de características comunistas, maoistas y autoritarias que, bajo la apariencia formal de una república popular, consolidó en la práctica un sistema de economía radicalmente agraria.
Con los Jemeres Rojos en el poder, se llevó a cabo un genocidio en donde murió una cuarta parte de los habitantes de Camboya, cifra no inferior a los dos millones de personas más las secuelas que ello significó para el país en general. Sus matanzas no se limitaron al suelo camboyano ya que en territorio vietnamita se llevaron a cabo varias, como la más famosa Masacre de Ba Chúc (1978). Hace unos años oí a Tania Sánchez y a Pablo Iglesias definir a Camboya como el país con mayor numero de muertos en las cunetas; seguido de cerca por España. Me ofendió tanto que les dediqué un par de artículos, uno de cuyo enlace adjunto:
Pero volvamos a lo que las encuestas dicen sobre la inoportunidad del viaje a Vietnam y China de nuestro presidente. Dicen que evidentemente es necesario mantener relaciones económicas con todo el mundo paro que el momento es cuando menos, muy inoportuno y parece solo buscar el tocarnes las narices a Trump y americanos con memoria. No se si pretende mejorar, por superación, la imagen de Zapatero sentado al paso de la bandera de las barras y estrellas. Es imposible que, con la nube de asesores que hay en Moncloa, nadie avisara de estas coincidencias a Pedro Sanchez y en ese caso me queda la duda de si su viaje incorporaba un alto contenido de chulería para enredar en esa herida del pueblo americano, que se dejó en Vietnam más de 55.000 muertos y una sociedad dividida. Dificil olvidar estas coincidencias. Además nuestro futuro no debe pasar por sacar de España nuestras empresas productoras, camino de paises de mano de obra barata y aumentar nuestro ya muy elevado nivel de paro. Por cierto, Sánhez fue acompañado por empresarios que se quedaron en Vietnam, mientras él proseguía, en solitario, su viaje a China. Pocos productos les vendemos pero muchos les compramos.
Al regreso del viaje, nos obsequió con una charla colegial mientras detras estaba el slogan: "Compra lo tuyo, defiende lo nuestro": el Gobierno critica el proteccionismo de Trump con un eslogan más proteccionista. Todo un contrasentido.
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