miércoles, 11 de octubre de 2017

125 AÑOS DE DESPRECIOS DEL SEPARATISMO CATALÁN

Mientras vivimos la pantomima o independencia, coitus interruptus, del pasado 10 de octubre, parece necesario desmontar las mentiras del aún Presidente Puigdemont, recurriendo a nuestra pasada historia. Efectivamente hace 125 años, se presentaron las llamadas Bases de Manresa en las que se plasmaron las bases, valga la redundancia, del catalanismo político.      




Habían pasado 164 años antes de celebrar la 1ª Diada (mucho tiempo de nacionalismo dormido), desde el fin de la guerra de sucesión; con el asalto a Barcelona por las tropas del Rey Felipe V, sin peticiones catalanas dignas de mención; salvo las guerras carlista y la de los agraviats, pero estas guerras eran por ver si teníamos una reina o a su tío e incluso si volvía la Santa Inquisición como pedían los agraviats. Previamente a las referidas Bases, Valentí Almirall y otros, en marzo de 1885, llevan al moribundo (seis meses antes de su muerte) rey Alfonso XII un Memorial de Agravios porque el gobierno pretendía unificar el derecho civil en toda España (Cataluña aún mantenía el vigente en 1714) y liberalizar el comercio textil para que todos los españoles pudiesen comprar tejidos ingleses que eran mejores y mucho más baratos que los catalanes; por algo similar se levantaron en armas en la Barcelona de 1842 y Espartero tuvo que bombardearla. Proponían una monarquía dual, es decir que Cataluña y el resto del Estado, tendrían el mismo rey, carreteras comunes; un ejército común (Cataluña podía aportar tropas o dinero para pagar a otros); el único idioma oficial sería el catalán y otras lindezas que pueden leerse en estos documentos adjunto y que se han repetido en diversos Estatutos. En el período previo a las Bases, en 1882 Almirall funda el Centre Catalá, del que surge la Lliga de Catalunya que en 1891 pasa a llamarse Unió Catalanista con Prat de la Riba, padre de las referidas Bases y ya en 1901 llegamos a la Lliga Regionalista de Prat y de Cambó.
                                                                            
Estamos iniciando el S.XX y acabamos de perder Cuba, Filipinas y Santo Domingo, en 1898, con cuya derrota la burguesía catalana estaba enojada pues para ellos representaba el adiós a su lucrativo y casi monopólico comercio de azucar y licores. Claro si los castellanos y demás españoles no eran capaces de defender los intereses económicos de Cataluña, para qué los querían.

Así llegamos a descubrir que el España nos roba, no es una frase moderna sino que ya se utilizaba en 1904 por la revista satírica Cu-Cut, que también se burlaba de los militares hasta que llegaron sus ofensas a un nivel que motivó que un grupo de oficiales de guarnición en Barcelona asaltase y destruyera la imprenta que editaba la referida revista. Poco después y como consecuencia, los militares consiguieron la ley de Jurisdicciones que consideraba delito cualquier ofensa al Rey, Himno o bandera y se juzgaba por el Código de Justicia Militar.
Pobre Cataluña, esquilmada por una roñosa España y
un Madrid de borrachuzos que se beben las subvenciones
En 1919 Francesc Cambó como presidente de la Lliga, muerto Prat de la Riba, preparó un Estatuto que ni se admitió ni a trámite en las Cortes. Siempre estatutos de máximos inaceptables y así siempre. Seguimos por los turbulentos años 20 y nos encontramos una gran pitada al himno nacional, es decir tampoco es de ahora como protesta por no se qué, en el campo del Barca; durante un partido de celebración de un doblete y que amenizaba la banda de música de un barco inglés en visita de cortesía. Naturalmente fue clausurado durante varios meses y el presidente del Barca invitado a salir de España. No se volvieron a repetir las pitadas. Gobernaba Primo de Rivera, con el apoyo de la burguesía catalana y de Cambó ( en de la Lliga), pues les había librado de los comando violentos de los anarquistas de la CNT 

El referido partido en el verano de 1925.

Después del golpe de Estado de Primo de Rivera, en septiembre de 1923, Francesc Macià, fundador de Estat Català y diputado en Cortes, se exilió a Francia, instalándose en Bois-Colombes, cerca de París. Desde allí planificó una acción armada para invadir Catalunya, pues creía que era la única forma de lograr la independencia. Lo intentó el 2 de noviembre de 1926 a través de Prats de Molló con la ayuda de otros exiliados y mercenarios italianos. Terminó en un rotundo fracaso y su marcha como refugiado a Bélgica, como Puchi, desde donde siguió confabulando y tras su paso por Sudamérica. Volvió a España en febrero de 1931, dos meses antes de la elecciones municipales.
Francesc Maciá exiliado en Bruselas
http://www.lavanguardia.com/politica/20171112/432819128151/francesc-macia-refugio-bruselas.html?facet=amp

Llegamos así al 14 abril de 1931, cuando en media España se celebraba y proclamaba la República, Maciá proclamaba la República Catalana dentro de la Federación Ibérica, ¿¿??.Esta proclamación pilla por sorpresa al Gobierno Provisional que envía tres ministros que convencen a Maciá para que de marcha atrás a cambio de recuperar la Generalitat y la aceptación de un Estatuto. Dicho y hecho, tras dos meses de deliberaciones surge el Estatuto de Nuria (por el Monasterio donde se redactó), que es enviado a las Cortes, donde produce un gran estupor pues nuevamente es una asimilación a las Bases de Manresa, engordadas de competencias: único idioma oficial el catalán no solo interiormente sino también para relacionarse con el Estado Central; posibilidad de independizarse a su sola voluntad....Naturalmente es cepillado tras más de un años de discusiones y cuando en septiembre de 1932 es aprobado, hay manifestaciones en Cataluña contra esa minoración, ¿nos suena? y no estaban Rajoy y el PP recogiendo firmas para llevarlo al Constitucional

Reclamación del Estatuto de Nuria, sin retoques. ¿nos suena?


Para situar el trato recibido por los inmigrantes murcianos en los años 30 y de Andalucía, Murcia y Extremadura, principalmente, durante los años 60 a 80, nada mejor que unas frases de lo líderes y padres de la patria independentista:



Escuchar a Puigdemont hablar de democracia y de amabilidad, la marcha de las sonrisas, cuando sus predecesores y maestros llevaban a los inmigrantes a barrios y viviendas insalubres o los consideraban anárquicos, ignorantes y poco hechos, es poco coherente.

Ahora, muchos demócratas temen que la intentona nacionalpopulista quede sin respuesta con la coartada de la paz, que sería cobardía y desvergüenza política. El supremo arte de la guerra, según los clásicos, es someter al enemigo sin luchar;pero cuando el enemigo es el nacionalismo, no se le somete nunca. Que no se fíe el Gobierno: volverán a organizar con astucia su venganza. Seguirán con el memorial de agravios y su falsa moderación. «Ni DUI ni 155. Lo valiente hoy es escuchar», dice ahora con suavidad Ada Colau, después de estar vociferando en la barricada del fanatismo. Pretenden un dialogo a partir de un chantaje y una amenaza. Así lo ven los franceses de la revista Charlie Hebdo:

Los catalanes más gilipollas que los corsos 




8 comentarios:

  1. Veo que un texto de un tal Pere Rosell y Vilar es fácilmente asociable a Companys por la foto que lo acompaña. E inmediatamente me salta la duda sobre la autoría de las palabras junto a la foto de J. Pujol: ¿Son suyas o de algún correligionario?

    ResponderEliminar
  2. Estos recordatorios históricos hoy son imprescindibles para entender mejor la encrucijada que vivimos. La portada de Carlie Hebdo es reconfortante, sobre todo por ser una enorme bofetada a la revista de escatología aplicada del antifranquismo catalanista sobrevenido llamada El jueves. ¡Bien Criticón!

    ResponderEliminar
  3. ¿Retirada de las fuerzas de ocupación? (Puigdemont dixit)

    ¿Se impondrá la razón económica (la pela es la pela) a la emotividad nacionalista?

    ResponderEliminar
  4. Dejo esto por aqui y me explicas por que la historia se repite.

    https://es.m.wikipedia.org/wiki/Mancomunidad_de_Cataluña

    ResponderEliminar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  6. Supongo que porque el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra y porque nadie escarmienta en cabeza ajena. Los mismos patronos que apoyaron la llegada de la Dictadura de Primo Rivera para que acabase con el anarquismo y erradicar la violencia de las calles, posteriormente se volvieron contra él. La mancomunidad fue realmente disuelta por Calvo Sotelo, dentro de su política fiscal y control estatal.

    ResponderEliminar
  7. Está claro que hay una sola cosa que entienden, y que es el jarabe de palo.

    ResponderEliminar
  8. Inglaterra acabó con los levantamientos de Escocia, tras la batalla de Culloden, mediante la horca, las expropiaciones y los destierros de los cabecillas y sus seguidores y nadie duda de la democracia inglesa.

    ResponderEliminar