He superado mi record , sin escribir sobre Pedro Sánchez, con algo más de un mes, desde el pasado 25 de agosto, y no ha sido por falta de motivos pero he aguantado hasta que la desfachatez de Sánchez ha saltado allende los mares, aprovechando su presencia en Nueva York. Desde allí ha anunciado su intención de presentarse a presidir la Internacional Socialista que se reunirá en Madrid este próximo mes de noviembre. Mientras tanto, generosamente con el dinero de nuestros impuestos, aprovecha su presencia en la Asamblea General de la ONU para regar con más de 500 millones de euros a varias organizaciones entre las cuales 130 van a una fundación de Bill gates en su lucha contra el cancer y otros tantos a la defensa de la mujer y que me recuerda a una aportación de Jose Luis Rodriguez Zapatero para colocar a varios personajes próximos ;como la ministra Bibiana Aido.
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| Sánchez con melida y Bill gates. Cara foto para nuestros bolsillos. |
Durante el gobierno Zapatero, España fue un país comprometido con la mujer y la igualdad de género, abanderando el ránking de los países que más dinero destinban a combatir la violencia y la desigualdad de género entre hombres y mujeres. Desde 2006 hasta 2010, el Gobierno Zapatero donó más de 200 millones de euros al proyecto estadounidense de ONU Mujeres que fichó a Bibiana Aído, exministra de Igualdad, como asesora "especial" de la directora ejecutiva de ONU-Mujeres, el organismo que presidía Michelle Bachelet. Ser la nación que más dinero invertía a la causa sirvió como razón de peso para que la organización compensase a España colocando en abril de ese mismo año a Inés Alberdi, esposa del exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, al frente de la dirección ejecutiva del Fondo de Desarrollo de Naciones Unidas para la Mujer (Unifem). En 2011, el último año en el que Zapatero se mantuvo en el poder, España siguió imbatible en el Top One de los países más comprometidos con los proyectos de igualdad de género de la ONU. Esta vez, con la crisis ya de lleno azotando a los españoles, la aportación del Ejecutivo central superó los 20 millones de euros, once millones más que la cantidad que abonó Reino Unido y Noruega.
Ambas circunstancias podían verse como una forma de hacer bolsa de resistencia para el futuro en que perdieran el poder. Sistema que se sigue al colocar a controladores como el marido de la ministra Ribera al que solo le quedaban cuatro meses, en la CNMC (Comisión Nacional del Mercado de la Competencia y pasa a otro de 4/6 años en la CNMV (Comisión nacional del Mercado de Valores); incluyendo una subida de sueldo de 15.000€ anuales que equivale a un 10%, para neutralizar la inflación.
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| Sánchez se reúne en Nueva York con inversores,entre ellos JP Morgan, Grupo Carlyle, KKR y la Cámara de Comercio de EEUU |
Sánchez aspira así a relevar en el cargo al griego Yorgos Papandreu, del Pasok, que ejerce la presidencia de la IS desde el 2006, durante el XXVI congreso que esta organización, que reúne a todos los partidos socialdemócratas, socialistas y laboristas, celebrará precisamente en Madrid los próximos días 25 a 27 de noviembre. “La socialdemocracia es la única alternativa viable tanto al individualismo del orden neoliberal como al retorno de los extremismos”, ha defendido Sánchez, para quien ambos fenómenos “van de la mano”. Así le vemos reunido con grandes inversores que le preguntan asustados por nuestra enorme deuda y la inestabilidad fiscal a la que Sánchez le quita importancia; mientras la ministra de Hacienda prepara un hachazo a las grandes fortunas y empresas financieras. Sanchismo en vena.
En Moncloa han preparado un menú que sirva a su inquilino para reivindicar su liderazgo global ante un posible salto internacional en caso de que las elecciones generales de finales de 2023 supongan la salida de Sánchez del Gobierno de España. Un puesto bien remunerado y con visibilidad donde aguantar y esperar la caída del gobierno del PP que se verá lastrado por la tremenda herencia que el PSOE le va a entregar. Sánchez y sus adláteres con el control del Tribunal Supremo y del CGPJ, frenaran cualquier reforma a las ideologizadas leyes que se estan aprobando. Sin poder modificar la ley de Memoria Histórica, o de solo el si es si, o la del aborto sin permiso ni conocimiento de los padres,... y alguna bomba de relojería a caballo de Troya en forma de referendum encubiertos en Cataluña y País Vasco.
Volviendo al principio del artículo para complementarlo, decir que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volvió de la asamblea general de Naciones Unidas, en Nueva York, con 573,5 millones de euros menos de dinero público. Y es que el jefe del Ejecutivo, en 48 horas, anunció que España destinará más de 237 millones de euros a salud global, de los que 130 millones irán destinados al Fondo Mundial de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria, una fundación que promociona el matrimonio de filántropos de Bill y Melinda Gates.. Otros 236,5 millones de euros iran para la seguridad alimentaria y además, “Si queremos seguir avanzando en nuestra agenda de derechos es imprescindible que continuemos apostando por el derecho a la educación para todos, pero muy especialmente para las niñas”, dijo el presidente antes de anunciar otros 100 millones de euros para la igualdad de género. Además, el Gobierno destinará otros 15 millones al Fondo de Intermediación Financiera para la Prevención, Preparación y respuesta ante pandemias, creado por el Banco Mundial. Buenas bolsas para ir colocando a amiguetes y altos cargos; si pierde el poder.
En los años 2023 a 2027, el PP conseguirá estabilizar la economía con grandes sacrificios impuestos por la deuda de un billón y medio que se encontrará y con unos intereses del 4/5%. El paro juvenil desbocado y las calles agitadas por los sindicatos CCOO y UGT que están siendo dotados de fondos de resistencia. Desde el PSOE, con Sánchez en la semipenumbra, pondrán todos los obstáculos posibles y así nos veremos abocados a otra vuelta de Sánchez que antes de 2030 nos colocará a las puertas de la IIIª República. Es mucho lo que nos jugamos pero nos tienen adormecidos con subvenciones que son pan para hoy y hambre para mañana.
Tanto ABC como la presidenta madrileña ha advertido que «le estamos pagando la campaña electoral a Pedro Sánchez; cada promesa de aquí a 2023 se verá financiada por una deuda pública que no votaron los ciudadanos». Pero, oh, habrá que ir pagándola y a intereses crecientes pues el banco central ya no se hará con ella. Y cumplir con el mandato de equilibrio presupuestario de la UE; cuando ya no queden excusas, cuando se imponga por fin el realismo; pero entonces en Moncloa estará Feijóo y el enorme aparato de agitación y propaganda de la izquierda estallará: ¡Ya os dijimos que el PP quería acabar con el Estado del Bienestar! No habrá paz para la derecha, donde hoy habita la socialdemocracia.
