Estamos a las puertas del 150 aniversario del nacimiento de la nación alemana, en plena consolidación de nacionalismos como el italiano y un año antes EEUU cerraba su herida secesionista. Europa se consolidaba como la mayor potencia imperialista y expandía su control militar y financiero por todo el mundo. La Iª G.M. supuso el comienzo del fin y la IIª G.M. alumbró su ocaso parcial frente al fulgor Ruso y americano. Al fin, en 1957 con el Tratado de Roma comenzó a crear la idea de unos estados unidos de Europa y resurgir como la mayor economía del orbe; hoy esa posición se ve afectada por el Brexit y el lento resurgir de nacionalismos extremistas en Austria, Francia...; nuevamente caminamos hacia tiempos pasados que nos llenaros de sangre y aflicción.
El S. XIX, origen y maduración de los nacionalismos y estados nación, podemos estudiarlo/dividirlo en tres partes. El primer tercio del siglo, empieza con conmoción de la Revolución francesa y las guerras napoleónicas a las que se pone fin con el Congreso de Viena de 1815 que pretende reorganizar Europa y Restaurar los cambios producidos por las guerras y revoluciones que habían asolado el continente durante los 20 años anteriores. Los vencedores Rusia, Austria e Inglaterra crean una Santa Alianza para controlar los aires revolucionarios y liberales que la Revolución francesa nos había traído. En nuestro caso la Constitución de Cádiz, marzo de 1812, que se encontraba entre las más avanzadas de su época., fue ignorada por Fernando VII y cuando su absolutismo trajo la revolución liberal en 1820/23, fueron tropas de la Santa Alianza quienes acabaron con ella. En la década siguiente, en el arco mediterráneo, brotan procesos revolucionarios en los años 1830/50.
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Mapa de Europa tras el Tratado de Viena
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Los años siguientes, hasta terminar esta treintena, vieron florecer nacionalismos junto con el Romanticismo y las historias heroicas que se buscaron para confirmar el concepto de "nación", Los Nibelungos, por ejemplo; los grande músicos y sus arias y óperas,...
Abundan los casos de naciones que obtuvieron su independencia en ese tercio, Grecia en 1821, nuestras colonias americanas en similar período, reafirmado tras la batalla de Ayacucho; perdida por los realistas y que terminó con las opciones de retenerlas en la corona.
En el segundo tercio del siglo, los diversos reinos de la península italiana comenzaron a moverse y pelear por su reunificación, igual que los principados germánicos. Coincide con la 1ª gran revolución industrial y el origen y desarrollo del ferrocarril. Llegamos así al final del segundo tercio que culmina, hace hoy 150 años, con la batalla de Sadowa (3 de julio de 1866) entre Austria y su aliado Sajonia y Prusia. Luchan por el predominio en los estados germánicos y
aquí se inicia la última fase de la constitución de la nación alemana. Padres de esta consolidación son: el Káiser Guillermo I, el canciller Otto von Bismark y su jefe de Estado Mayor, Helmuth von Moltke (el viejo). Su sobrino Helmuth Moltke "el joven", como jefe de Estado mayor alemán, no supo llevar a buen puerto la batalla del Marne en septiembre de 1914.
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Caballería austriaca y prusiana en Sadowa
Para mejor entender las circunstancias de esta batalla y la consolidación de pujantes naciones, con sentimiento y orgullo popular, nos retraeremos a los años inmediatamente anteriores en que austriacos combatían con los nacientes estados italianos; principalmente Piamonteses, apoyados por el rey francés Napoleón III. En 1859 tiene lugar la batalla de Solferino, ganada por franceses y piamonteses y del penoso espectáculo de heridos sin atención, nace la Cruz Roja por iniciativa del banquero suizo, Henri Dunant. Tras esta victoria, Italia se reunificaba bajo el rey piamontés Víctor Manuel II, gracias a la labor de Cavour en el norte y Giuseppe Garibaldi en el sur y Sicilia. En marzo de 1861 Víctor Manuel era reconocido como rey de Italia. En 1870 se unió el Estado vaticano y Roma tras perder el apoyo de Napoleón III tras el desastre de Sedán.
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Los intereses nacionalistas en el período 1861 a 1865 se siguen enfrentando en Europa y prusianos e italianos firman una alianza que al final desemboca en el enfrentamiento de Sadowa (Bohemia, R. Checa). El ejército austriaco está formado por más de 500.000 hombres frente a los poco mas de 300.000 prusianos, pero esta mayoría austriaca queda compensada al tener que dividir sus fuerzas para defenderse de los italianos y prusianos; así en Sadowa se enfrentan 130.000 austriacos contra 140.000 prusianos. Éstos además de la ventaja numérica tienen un fusil de cerrojo, Dreyse, muy superior al de avancarga, Lorenz, austriaco y también mejor artillería.
Los austriacos y sus aliados perdieron 40.000 hombres entre bajas y prisioneros y los prusianos apenas la mitad.
Tres semanas después se firmó la paz en Praga. Comenzaba el declinar de un imperio y el nacimiento de dos naciones: Italia y Alemania.
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Otto von Bismarck. Padre de la nación alemana
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Mientras en Europa se luchaba por unir regiones, en EEUU se peleaban por desunir la nación.
La Guerra de Secesión estaba en su cenit en 1863 y coincidiendo las fechas, 1 a 3 de julio, tenía lugar su batalla mas sangrienta: Gettysburg, Pensilvania. Se produjeron unas 55.000 bajas de las cuales el 60% correspondió a sudistas.
Aquí comenzó el ocaso de Lee que termino en Appomattox el 9 de abril de 1865;
curiosamente 150 años antes de que Artur Mas fuese a pedir la ayuda y compresión americana a su idea secesionista; con la de días que tiene el año hay que tener puntería o ser un impresentable.
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La carga de Picket y sus virginianos en Gettysburg
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En el último tercio del siglo, las naciones con ese sentimiento patrio, se emplean en extender y consolidar sus imperios.
Coinciden en la 2ª revolución industrial y en la formación de los nacionalismos extremos que desembocarían en la Iª G.M. Italia y Alemania buscan crear un imperio con las migajas que Francia e Inglaterra les dejaron después de haberse repartido África.
Para soldar la unidad alemana, Bismarck crea un idioma común y aprovechando la búsqueda de un rey para España, le tiende una trampa a Napoleón III que cae en ella y en 1870 tras la derrota de Sedan se apropia de Alsacia y Lorena, hiriendo el orgullo francés y plantando una semilla para la guerra del 14.
Rusia se expandió hacia el este y Siberia, tras su fracaso, en la guerra de Crimea, 1853/56, por alcanzar el mediterráneo; mientras EEUU ocupaba su oeste y se abría al Caribe y el Pacífico; esto último a costa de nuestro resto imperial (Cuba Filipinas y Puerto Rico). LOS NACIONALISMOS ESTÁN SERVIDOS Y PREPARADOS PARA SU CONFRONTACIÓN EN 1914/18.
Mientras surgían y se consolidaban estas naciones y sus imperios, nosotros nos enfrentábamos en tres guerras civiles, llamadas carlistas, una de Agraviats y Malcontents y tropecientos golpes de estado, derrocamientos, perdida de las colonias y 50 años de guerra con ellas (bombardeo del Callao)... El siglo termina con la venta de las Marianas, Palaos y las Carolinas, por parte de España a Alemania y el nacimiento de los partidos regionalistas catalanes y vasco. Spain is different. Alemania sigue siendo una gran nación, qué decir de EEUU, y nosotros gracias a Zapatero, Mas,..., discutiendo el concepto de nación española
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