martes, 21 de febrero de 2017

BATET EL HÉROE OLVIDADO

El pasado 18 se cumplieron 80 años del asesinato del general Domingo Batet. Fue un asesinato revestido de legalidad con un juicio militar del que se conocía el resultado, antes de comenzar, y cuya sentencia cumplió un pelotón de ejecución en Burgos; sede de la VI División Orgánica que mandaba el 18 de julio del 36 y que no quiso sumar al alzamiento; confiado en la palabra que el general Emilio Mola, su subordinado, le había dado a cerca de su no participación en la conjura contra la República. Dos generales tan significados como Cabanellas y Queipo de Llano intercedieron ante Franco pero sin resultado. El tribunal le había condenado a dos penas de muerte y como solo se le podía conmutar una de ellas...; pero analicemos como y por que se llegó a esa situación con el laureado general como el héroe que frenó el golpe separatista de Lluis Companys en octubre de 1934.


General Domingo Batet
Domingo Batet nace en Tarragona en el último tercio del S XIX, lo que le permite participar en la guerra de Cuba, donde asciende a capitán por méritos de guerra. Vuelto a la península va ocupando diversos mandos hasta su ascenso a general de brigada en 1925. Previamente, como coronel, es nombrado juez investigador del desastre de Anual. Esta investigación se materializa en el informe Picasso, por ser el nombre del general que dirigía la investigación, que ponía en entredicho, entre otras conclusiones, la actuación del comandante Francisco Franco; hasta el punto de paralizar su ascenso a teniente coronel y a la laureada. Aquí tenemos el primer antecedente de lo que 15 años después Franco le devolvería . El expediente Picasso, que implicaba al propio rey Alfonso XIII, no llegó a publicarse pues Primo de Rivera dio su golpe de Estado, con la anuencia del monarca.

Años después, Batet interviene en un intento de revertir la situación dictatorial, la Sanjuanada, pero es juzgado y absuelto. Aquí aumenta la amistad que Batet y Queipo de Llano mantenían desde su época de tenientes en la guerra de Cuba. La República le considera afín y le otorga diversos puestos de responsabilidad. Nombrado Capitán General de Cataluña y jefe de la IV División Orgánica en julio del 31, el levantamiento del 6 de octubre de Companys le pilla en Barcelona como jefe militar. 
Escrito de Companys a Batet
Se niega a ponerse a disposición de éste y tras hablar con el Presidente de Gobierno, Alejandro Lerroux, decreta el Estado de guerra y acaba con el levantamiento en apenas 24 horas; con un escaso derramamiento de sangre. Ironías de la historia, el golpista es recordado cada año y el defensor de la legalidad sufre un desagradecido olvido.

Lluis Companys.


Estas fechas coinciden con la sublevación de Asturias cuya solución se le encarga al general Francisco Franco, que incluso envía tropas legionarias para ayudar a frenar el golpe de Companys, pero Batet las rechaza por innecesarias. Franco pide una acción más enérgica contra los golpistas pero no es atendido. Pasan los años y llegamos al levantamiento del 18 de julio del 36. Los días anteriores los rumores de la asonada corren por los cuarteles y el general Domingo Batet, ahora jefe de la VI División Orgánica con sede en Burgos, se reúne con el general Emilio Mola, jefe militar de la subdivisión con sede en Pamplona, en el Monasterio de Irache para sondearle. Ahí Mola le da su palabra de que no forma parte del complot y confiado en esa palabra Batet se opone a sublevarse, dos días después, siendo destituido y encarcelado. Tras un sucedáneo de juicio militar es condenado a muerte y aunque los generales Cabanellas y Queipo solicitan su indulto, Franco no les atiende la demanda y el 18 de febrero del año siguiente, es fusilado. El héroe de octubre del 34, premiado con la Laureada por defender a la República, es fusilado en el 37 por idéntico motivo: defender a la República.
Aquí a la izda, valientes y marciales Scamots prestos a defender a la República Catalana. Debajo van detenidos junto a los mossos. Triste papel de comparsas con su jefe, Josep Dencás, huyendo por las cloacas. En la otra fotografía, Batet  sustituyendo al gobierno de la Generalitat, a lo que hoy no se atreve el gobierno de Rajoy con su 155


¿Pero que motiva que Franco no atendiese a los requerimientos de Cabanellas y Queipo de Llano?. En primer lugar seguro que recordaba el enfrentamiento a cuenta de Marruecos, pero había otras dos razones: el general Cabanellas fué el único miembro de la Junta de Defensa que votó en contra del nombramiento de Franco como generalísimo el 29/30 de septiembre del 36. Cabanellas muy republicano y masón nunca fue santo de devoción de Franco y por tanto su intercesión era más bien perjudicial. El tercer motivo estaba relacionado con el fusilamiento en agosto del 36 del general Miguel Campins; muy amigo de Franco; con el que coincidió en Marruecos, en el desembarco de Alhucemas y al que éste llamó a su lado, para ocupar el puesto de jefe de estudios, cuando fue nombrado Director de la Academia de Zaragoza. Campins llegó como general jefe a Granada unos días antes del 18 de julio y por tanto no tuvo tiempo de establecer amistades ni complicidades. Durante el susodicho día 18, dudó entre sublevarse y permanecer fiel a la República, al final le detuvieron y condenaron a muerte. Franco intercedió pero Queipo de Llano no solo no le escuchó sino que le contestó que lo pensaría el lunes, a pesar de saber que el domingo sería pasado por las armas.

Llegamos a la conclusión, nuevamente, de que bastaba una mala acusación o un enemigo vengativo para que te dieran el paseo y terminaras frente a un paredón. Se pagaron, con la muerte, muchas rencillas, en uno y otro lado; sin que sirvieran los servicios prestados a la Patria. Han pasado 80 años y en las redes he encontrado poco eco de este recuerdo hacia un hombre que no solo cumplió con su deber, sino que además ayudó a mantener unida a Cataluña al resto de España. Ojalá tuviésemos hoy otro Domingo Batet en Cataluña.




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