Estamos en el centenario de la consolidación de la independencia de Polonia, frente al ataque traicionero del ejército rojo, tras el final de la 1ªG.M. Efectivamente, como consecuencia de la paz de Versalles, tras la primera guerra, surgieron algunas nuevas naciones y otras renacieron a partir de la desmembración de los imperios, alemán, turco, ruso y austro-húngaro. Entre estas últimas se encontraba Polonia que tras más de cien años de ocupación prusiana-austriaca y rusa, recuperaba su identidad. Los enfrentamientos fronterizos desembocaron entonces en una guerra abierta tras el avance hacia el este de Ucrania de Piłsudski (abril de 1920), el cual fue detenido por un contraataque del Ejército Rojo, inicialmente exitoso. La operación soviética empujó a los polacos de regreso hacia el oeste, hacia la capital polaca, Varsovia. Entretanto, Occidente temía que las tropas soviéticas llegaran a la frontera alemana, y se incrementó el interés de las Potencias Occidentales en la guerra. A mediados del verano, la caída de Varsovia parecía cercana, pero a mediados de agosto la situación cambió de nuevo cuando las fuerzas polacas alcanzaron una inesperada y decisiva victoria en la batalla de Varsovia (llamada el milagro de Varsovia), ahora hace 100 años. Ante el temor de un avance polaco hacia el este, los soviéticos pidieron la paz y la guerra terminó con un alto el fuego en octubre de 1920. Esta frontera permaneció inmutable durante 19 años, hasta que...
La 2ªG.M. comienza cuando las potencias aliadas, Inglaterra y Francia le declaran la guerra en defensa de la integridad polaca que ha sido quebrada por la invasión alemana el 1º de septiembre de 1939. Curiosamente 15 días después y sin previo aviso es Rusia quien invade Polonia y los aliados miran para otro lado. Al terminar el mes, Polonia es repartida entre rusos y alemanes. Seis meses despues en las fosas de Kattyn, el ejército ruso asesina a más de 20.000 oficiales y altos cargos civiles polacos. Silencio absoluto e intento posterior de echarle las culpas al ejército alemán; que ya tenía lo suyo con los judíos. Cuando Varsovia se levantó contra las tropas de ocupación en el verano del 44, el ejército ruso esperó a orillas del Vístula hasta que la resistencia fue aplastada y eso que parte eran tropas polacas. La integridad polaca, causa de la guerra fue ignorada cuando tras la rendición alemana, quedó bajo la bota estalinista y eso que habían luchado formando parte de los ejércitos aliados.
A finales de noviembre del mismo 1939, el ejército soviético atacó a traición a Finlandia y naturalmente los aliados miraron para otro lado. Tras cuatro meses de dura y desigual lucha, con grandes pérdidas de personal y material por parte del ejército rojo, Rusia hizo valer su superioridad. Finlandia firmó el armisticio en marzo del 40 y perdió gran parte del Istmo de Carelia y alguna otra salida al mar; en total el 10% de su territorio. El ataque a traición no se olvidó fácilmente. Cuando en junio del 41, Alemania invade Rusia, los fineses se pusieron de su lado para recuperar esa tierras pero como al final Rusia fue vencedora...Finlandia se mantuvo neutral durante la guerra fría y forma parte de la UE desde 1995.
El siguiente ataque a traición y sin declaración de guerra se produjo cuando en el verano de 1941 los rusos y los británicos invadieron Irán con la escusa de la amistad del Sha con los alemanes y acabaron deponiéndole. Reinaba el padre del último Sha, Reza Shah, que en la década de los años 30 había reemplazado las leyes islámicas por leyes occidentales, prohibió la separación de sexos, la ropa islámica fue perseguida, las mujeres podían ir a la universidad... Terminada la guerra se le devolvió la independencia pero el gobierno pasó al hijo, Reza Pahlavi ,.... , que gozaba de la amistad de EEUU y de la mayoría del mundo occidental. Otro error de EEUU, que para amansar a Jomeini dejó caer al Sha en 1979 y se quedó sin gendarme en la zona y ya vemos y disfrutamos de las consecuencias. Después de más de 30 años de servicios a occidente, murió en el exilio tras vagar por diversos países. ¿Lo veremos con el Emérito?.
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| Jóvenes persas en los 70 |
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Jóvenes persas 30 años después |
Para culminar esta serie de ataques a traición llegamos al que ahora cumple 75 años, cuando Stalin declara la guerra a Japón e invade Manchuria. Previamente los japoneses habían intentado que Stalin hiciera de mediador en las condiciones de la paz entre ellos y los aliados. Ante las buenas palabras del líder ruso, decidieron esperar. Mientras tanto ya había estallado la bomba atómica de Hirosima y faltaban poco para que lo hiciera la de Nagasaki. Rusia cumplía su compromiso con los aliados de atacar a Japón tres meses despues de que terminara la guerra en Europa. Así lo hizo puntualmente, pues Alemania firmó su rendición el 8 de mayo y Rusia atacó, innecesariamente, a los japoneses el 8 de agosto del mismo 1945. Un ataque a un ejército y una nación en estado de schock tras las dos explosiones nucleares y con las tropas aliadas a las puertas de la metrópoli. Truman apresuró la 2ª bomba para que los japoneses se rindieran antes de que Stalin les declarase la guerra y se sentara en la mesa de los vencedores en Extremo Oriente.
Un minuto después de la medianoche, el 9 de agosto de 1945, los soviéticos comenzaron su invasión simultánea en tres frentes al este, al oeste y al norte de Manchuria; territorio con una superficie tres veces la española. Los rusos eran superiores en la relación 6 a 1 en tanques y aviación. En una semana, el ejército soviético, ya controlaban los montes y los principales pasos y habían asegurado bases en la costa mediante desembarcos anfibios. El 15 de agosto el Ejército Imperial decretó la rendición, transmitiendo una alocución especial del Emperador Hiro Hito (muchos era la primera vez que oían la voz de su emperador) pero las malas comunicaciones y el código Bushido, contrario a la rendición, prolongo resistencias localizadas hasta el 25 de agosto. Japón tuvo, en esta breve contienda, mas de 70.000 muertos y desaparecidos y 600.000 prisioneros. Cuando en diciembre de 1941 con los alemanes a las puertas de Moscú, Japón eligió atacar a los EEUU en vez de a los rusos, selló su suerte y estos le pagaron culminando su traición.
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