La Secta Noche llevó, el sábado pasado, a varios invitados para babear con la intervención de Sánchez en Torrejón, pero se encontró con la horma de su zapato con el famoso fotoperiodista, Gervasio Sánchez, conocedor del tema por su experiencias sobre el terreno, que acudió entre esos invitados a 'La Sexta Noche', donde dio su valoración acerca del papel que ha jugado en las evacuaciones de Afganistán el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Empezó diciendo al entrevistador: "Antes de contestarte, decirte que me ha parecido lamentable, incluso hipócrita, patético, lo que ha ocurrido esta mañana en el aeropuerto de Torrejón de Ardoz, con el señor presidente del Gobierno vanagloriándose de que se había hecho una gran operación. Se está haciendo una gran operación al lado del alto comisionado de la Unión Europea, que es tan culpable del desastre que ocurre en estos momentos en Afganistán como Estados Unidos", a continuación siguió su intervención el periodista con un "me parece alucinante no haber escuchado una sola palabra de autocrítica por parte del señor Sánchez, incluso, decir que estos 20 años no han sido en balde"; ha señalado visiblemente molesto. "Esto es mentira, si ustedes se marchan del país y dejan el país empantanado, estos 20 años por supuesto que han sido en balde. Porque ustedes han permitido la corrupción generalizada, que ha sido el efecto "bomba" que ha provocado la caída total del ejército afgano. Es alucinante que el presidente, en un momento como este, no sea capaz de hacer la más mínima autocritica".
Pero antes de terminar el programa, saltó la gran noticia de la Secta Noche, al fin tras siete meses el Presidente Biden había llamado a nuestro Presidente Pedro Sánchez y esa conversación ha ocupado los periódicos y televisiones paniaguadas por este gobierno que solo atiende a la foto y al Falcon. La foto no tiene desperdicio, con la cartera mirando a un supuesto interlocutor presencial y la mesa con tantos papeles que no hay sitio para las manos. La llamada venía motivada/obligada por el tratado firmado por EEUU y Franco, en septiembre de 1953, renovado varias veces, la última hace un año, para el uso de las bases de Rota y Morón, que obligan a los norteamericanos a pedir permiso para su uso no estrictamente militar; aunque existía un pacto secreto que eliminaba esa condición.
Nuestro fotogénico presidente se puso la medalla del HUB de Torrejón, que abre las puertas para recibir y clasificar a todos los afganos que puedan llegar. Un claro recuerdo de los montajes con el Open Arms y el Aquarius, que nos trajeron, junto con la mezcla de incompetencia y demagogia que caracteriza al Gobierno y a sus adláteres, la crisis migratoria en Canarias, que lleva camino de convertirse en un problema de primera magnitud a añadir a los ya existentes en España; sin olvidar Ceuta y Melilla, en los que se abre una ventana de oportunidad al ofrecer el monarca marroquí una nueva interlocución que nos costará otro ojo de la cara.
Hinchando el pecho (José María Carrascal)
Otros países como Reino Unido o Alemania tenían en Afganistán más colaboradores, y los están trayendo sin fanfarria, nada conveniente en este tipo de operaciones
Lo explicaba muy bien en ABC el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, almirante López Calderón: «Hay países, como Reino Unido y Alemania, que tenían allí fuerzas presentes. Ellos ya tenían el operativo. España ha tenido que desplegarlo desde cero». Esta crisis nos ha pillado con la misión en cuadro: el embajador, otra diplomática, 10 GEOS y 7 agentes de Seguridad. Retengan estos datos, así como las fechas citadas, porque entenderán mejor lo que está ocurriendo. De momento, se han enviado dos diplomáticos más y algunos policías especialistas en misiones encubiertas. Que se cubran está por ver. Pero Pedro Sánchez ya ha cumplido. De balde, además.
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