lunes, 4 de noviembre de 2024

ME NIEGO A OTRO 11 M O A OTRO PRESTIGE. SANCHEZ SEGUIRÁ.

Ya tenemos a ministros lavándose las mano y dejando que Carlos Mazón y el PP valenciano se cuezan en su salsa para luego aparecer como los salvadores de los valencianos y de toda España. Sanchez consignará en los PPGG, una partida para los damnificados y un plan trienal para construir defensas en el barranco del Pollo y con ello sus PPGG no se los tumbará nadie y el garantiza su legislatura. En una declaración institucional con motivo de la DANA que ha azotado a la Comunidad Valenciana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado «el mayor despliegue de efectivos» de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de las Fuerzas Armadas de la historia de España «en tiempos de paz». Sin decidirse a tomar el mando único de la catástrofe, Sánchez ha avanzado que, una vez había hablado con el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, trabajarán en Valencia un total de 17.000 militares, policías nacionales y guardias civiles. Pasados 6 días, las responsabilidades van de un lado a otro, obviando la Constitución.



El retraso en movilizar al ejército ha creado un enfado tal que en la visita a Paiporta de este domingo, de los Reyes, Sanchez y Mazón, han sido atacados con barro e insultos. La violencia no es admisible pero lo más vergonzoso, no ha sido la explosión de ira de los vecinos, sino la fuga a toda carrera del socialista Sánchez; cuyo vehículo, izda, ha sido golpeado y pateado. Luego ha terminado con un truco para despistar con el cristal posterior, roto pero era otro coche con otra matrícula. Trilerismo. Los Reyes y Mazón han aguantado los gritos y las pelotas de barro. acercándose a los que les increpaban para hablar con ellos e intentar transmitirles ánimo. Estaba prevista una visita a otra población pero Moncloa lo ha prohibido.



El líder del Ejecutivo, que ha indicado que «no se trata de que la Administración del Estado reemplace a la Administración autonómica», sino de «colaborar». Moncloa ha preferido escurrir el bulto y jugar tácticamente a que el Ejecutivo regional de Carlos Mazón se cociera en su salsa. "El Gobierno central está listo para ayudar. Si necesita más recursos, que los pida. No hace falta para priorizar unos principios sobre otros. Se priorizan cuando faltan medios y este no es el caso". 

Una parte de la izquierda vio desde el principio en la famosa DANA una oportunidad de oro para recuperar electoralmente la Comunidad Valenciana… por eso han estado estos días más preocupados por buscar culpables que por encontrar soluciones para paliar las terribles consecuencias del temporal. Las pequeñas presas que debían controlar los afluentes en el interior, desangrando la fuerza del Turia desaparecieron en los últimos años. La DANA ha dejado en evidencia las carencias del sistema: una clase política incompetente, una administración excesivamente burocrática, una legislación poco clara ante siniestros como este…El dolor sigue y seguirá presente, pero la gente se organiza gracias a líderes naturales que miran el desastre de frente demostrando una rapidez de reflejos admirable. Un desprestigio para el Estado de las Autonomías; suplido por los voluntarios.


Voluntarios esperando los autobuses para ir a ayudar.

Por contra, la sociedad civil se ha volcado en Valencia con tanto entusiasmo que las autoridades han tenido que pedir a los colaboradores espontáneos que no estorben el paso urgente de los vehículos de transporte. Cabe preguntarse cómo es que la gente común ha llegado antes que los servicios de las instituciones, y la respuesta es que, a diferencia de los cuerpos de uniforme, los voluntarios no necesitan órdenes. Es ya un clamor la pasividad oficial para movilizar a policías, bomberos y sobre todo militares, que disponen de medios eficaces y de la capacidad operativa y logística exigida por los descomunales estragos del desastre. La sombra del escapismo de la pandemia, aquel ejercicio evasivo que la neolengua sanchista denominó cogobernanza, se proyecta sobre una Comunidad Valenciana cuyos dirigentes parecen sobrepasados por la gravedad de las circunstancias sin que el poder central demuestre suficiente voluntad solidaria. La estampa de miles de vecinos con palas enfrentándose al fango a su manera o velando a sus muertos a la puerta de sus viviendas no retrata precisamente el desarrollo de una nación moderna.

Es inevitable pensar que, si Sánchez es capaz de utilizar la Fiscalía para destruir a Ayuso, la actitud contemplativa del Gobierno respecto a Valencia se puede deber a una estrategia para liquidar a Mazón. Luego vendrá Sánchez el salvador, como en la pandemia. Pedro Sánchez ha preferido humillar a Mazón que acortar el recuento de muertos y con esto tendrá que vivir el resto de su vida. "Si necesitan ayuda que la pidan". Esta frase va a perseguir a Pedro Sánchez mucho tiempo.


Lo que ha pasado también es que el presidente Sánchez ha preferido evitar el ruido político de intervenir una autonomía y no ha tomado el mando único para de verdad ayudar a los afectados. Pero el gran Narciso se estaba mirando como siempre en el espejo del «y yo ¿qué gano?»


Sánchez vuelve a hablar de las situaciones que estamos viviendo como consecuencia de la emergencia climática y también de la necesidad de respetar el asesoramiento científico y adaptarnos al cambio climático. Como si no lleváramos más de 50 DANAs en los últimos 500 años. Nos sorprenden porque el Estado escatima dinero en infraestructuras que habrían mitigado los desperfectos y ahorrado muchas vidas. Ahora nos gastaremos más dinero en reparar y las vidas perdidas seguirán siéndolo por negligencia preventiva.


Julio de 2004. La Confederación del Júcar preveía actuaciones en los barrancos del Pozalet, la Saleta y el Poyo. Cerca de una veintena de municipios ya no mirarían al cielo con temor cuando llegaran las tormentas. El Gobierno anunció, hace años, el plan contra riadas para 16 municipios que incluye la creación de una presa en Cheste. Se prevían actuaciones, además, en los barrancos de la Saleta, el Pozalet y la rambla del Poyo. La comarca de l’Horta sud ha sido históricamente una de las más castigadas por las grandes inundaciones en temporadas de gota fría. Poblaciones enteras han visto año tras año como el agua del barranco del Poyo se ha desbordado llegando a anegar bajos, viviendas y causar serios desperfectos en vehículos e inmuebles. El desvío de la Saleta ha sido una de las principales reivindicaciones del Ayuntamiento de Aldaia. Esta población se encuentra bajo la influencia de los barrancos del Poyo, Gallego y Pozalet. La última gran riada se vivió en octubre de 2000. En la rambla del Poyo, en su confluencia con el barranco Gallego, se ha delimitado el área de mayor riesgo de inundación para su reserva como zona laminación natural. En las poblaciones de Torrent, Picanya y Paiporta, la rambla del Poyo se encuentra bien definida. Han pasado 20 años y aún no se ha construido la presa en Cheste que hubiese minorado mucho los daños.


Desde 2019 el Gobierno de Sánchez sabía que el barranco del Poyo era ARPSI. Área con Riesgo Potencial Significativo de Inundación. Zona donde existe "un riesgo potencial de inundación significativo o bien la materialización de tal riesgo pueda considerarse probable como resultado de los trabajos de Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación (EPRI)". Fiel a su ficha, el Poyo inunda Valencia con la DANA. El Gobierno incluso poseía proyecciones de las zonas que inundaría en caso de desborde.


La obligación el Estado es prevenir aquello que tiene visos de suceder y así minimizar los daños físicos y personales. La zona es inundable y su origen se debe a avalanchas de lodos que han ido rellenando la bahía y reduciendo el tamaño de la Albufera. Lo que ha ocurrido era totalmente previsible y hay estudios que lo demostraban, pero la Confederación, es decir el Gobierno, han preferido dedicar los 200 millones necesarios a otras labores y ahora nos gastaremos ¿5.000? y centenares de vidas irrecuperables. Esto pone toda la responsabilidad en un único platillo de la balanza. ¿Y quien autorizó a construir en zona inundable sin mejorar su defensa?. En las anteriores riadas de 1957, también se desbordó el barranco del Pollo pero entonces Paiporta tenía 4.000 habitantes y no los 26.000 actuales. Un riesgo conocido y alguien jugó a la ruleta rusa en la cabeza de los actuales perjudicados.




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