Oía ayer una rueda de prensa de Rita Barberá en la que se despedía de la alcaldía de Valencia, que va a ser ocupada por un populista independentista, orgullosa de su gestión y de dejar 100 millones de euros en caja. Toma castañas lo que se lo han valorado los valencianos, o acaso le han dado en su culo una de las patadas dirigidas a Rajoy. A continuación leía el "pacto programático" de la coalición que le ha quitado el poder: populismo puro, renta básica, ayudas para evitar que nadie se quede sin luz, agua o gas por no poder pagarlo........., etc. Pero ¿Cómo pagar esos populismos?, ¿de donde sacar los dineros sin subir los impuestos y ahuyentar a los votantes de las generales?. Albricias, Rita se lo da hecho con los 100 millones que se vanagloria de dejar en caja; calentito para gastar.
A los populistas no se les va a caer la careta gracias a la gestión de los dirigentes del PP que les dejan las cajas saneadas, al menos hasta después de las generales. En lugar de haber empleado esos saldos en lavar su imagen, se lo van a dar hecho a sus sustitutos.
Continuamente vemos que la tibieza de Mariano Rajoy ha motivado la desilusión de millones de españoles que le votaron en las elecciones de 2011. En otro artículo he comentado los incumplimientos en la ley del aborto, comportamiento con las victimas del terrorismo, permitir que los Bildu y compañía sigan campando a sus anchas (ahora acaban de quitarle con sus votos la alcaldía de Vitoria), independencia del Poder Judicial........... Para rematar el dislate no ha aprovechado su mayoría absoluta para cambiar una Ley Electoral injusta con las mayorías que no son absolutas y por tanto absolutamente perjudicial para el PP.
Si miramos los mapas de las elecciones que tiñen de color azul los lugares donde ha tenido mayoría el PP, veríamos una gran victoria, pírrica naturalmente pues ahora con los pactos contra el PP, esa mayoría se reduce en un 70%. Ole la visión de Rajoy y sus asesores y dirigentes. Amenazó con presentar la ley pero como los demás partidos no le iban a apoyar, no la presentó y viendo la que se le venía encima siguió creyendo en un milagro económico le salvaría. Craso error de cálculo.
En Madrid todos alaban la gestión económica y el saneo de cuentas de la alcaldesa Ana Botella, pero quien se va a aprovechar para mejorar su imagen es Manuela Carmena, con similar programa que en Valencia.
Un particular escribía en ABC, al pie del texto de la comparecencia de Rita Barberá, sobre los 100 millones de caja del Ayuntamiento de Valencia, comparándolos con los 800 millones de deuda consolidada, error e insulto a la inteligencia: cualquiera puede tener en casa y en las cuentas del banco, 10.000 € , perfectamente compatible con tener una hipoteca de 100.000 a 20 años. La importancia de la deuda es relativa en función de la capacidad de generar recursos para pagarla. La hipoteca del ejemplo anterior es importante para un mileurista, pero no para quien tenga un sueldo de 40.000 € al años, o más.
Las inversiones en bienes que van a durar décadas y las van a usar varias generaciones, tienen que ser pagadas por todos y no solo por los que están en edad fiscal en el momento de la ejecución. El endeudamiento que provoca el metro en Madrid, Valencia, el enterramiento de la M-30, hospitales...., se tiene que financiar a largo plazo pues deben pagar todos los usuarios, presentes y futuros. Otra cuestión es si la inversión es oportuna o está mal fiscalizada y controlada.
Hay que reconocer lo bien que leen el tiempo electoral en Andalucía, los dirigentes o pensantes del PSOE. Griñan retrasó las autonómicas para que no coincidieran con las Generales, que traían vientos huracanados contra todo lo que oliera a Zapatero, viento que seguro barrió a más de un alcalde socialista que lo estaba haciendo aceptablemente pero recibió en su culo la patada a Zapatero. Esperó, con conocimiento de la situación financiera, lo más que pudo para que asomaran las carencias del PP e incumplimientos sabiendo que se iba a encontrar las cajas vacías, con telarañas donde no llenas de facturas sin pagar. El primer incumplimiento del PP era que en lugar de bajar los impuestos, tenía que subirlos, que para pagar las deudas tenía que congelar inversiones inmediatas en salarios de funcionarios, hospitales, obras públicas y generar paro........; así Griñan salvo el partido y como la ley permite sumar votos, engatusó a IU para no perder el poder.
La astucia del PSOE andaluz, germen del partido durante toda la Democracia, se ha vuelto a demostrar con la jugada de Susana Díaz ,que aparentemente se la juega adelantando las elecciones, cuando se deshace de una IU en fase de fagocitación por PODEMOS, que podía llevar a estos a enredar en su último año de mandato.
Susana Díaz, o quien lleve la cabeza pensante, ve que la economía mejora a buen paso y no iba a esperar un año a que el PP se recuperase con esa bandera, a dar tiempo a que un desconocido candidato se afianzara y PODEMOS siguiera creciendo. También Susana Díaz ha visto venir el peligro para el propio PSOE de pactar con PODEMOS y así lo ha expresado públicamente y no ha querido darle poder aceptando su apoyo para la elección; se han repartido cromos en los Ayuntamientos pero quedándose con la parte del león y quitándole aire y poder al PP (Sevilla, ....) Siguiente jugada maestra: no pactar la abstención del PP que podría ser mal entendida con sus votantes, no aceptar el apoyo condicionado de PODEMOS y si el neutro de su "amigo de años" Marín, de Ciudadanos; que solo puede ser negativo para los votantes de esta formación. MAGISTRAL y los dirigentes del PP mirando y sin aprender.
La evidente mejora de la economía no va a ser suficiente para que los desilusionados del PP vuelvan a las urnas, pero si van a permitir que en esa ola se suban los populismos y aprovechen para presentar realizaciones de sus propuestas sin costes adicionales y sus votantes satisfechos volverán en masas y algunos de los incrédulos, que no verán que esa bolsa saneada por el PP, con el esfuerzo de todos los españoles, se vaciará rápidamente.
Cuando las generales hayan pasado y empiecen los problemas, ojala me equivoque por el bien de todos y el mío propio, será tarde.
El PSOE pacta con cualquiera menos con el PP, ya ha sacado de la lista a BILDU en Vitoria y piensa que en las Generales van a llegar al Gobierno pues con el dinero de las cuentas saneadas se van a poner medallas no solo los populistas sino ellos que venderán que no había motivos para el miedo y victimismo que va a agitar el PP hasta las elecciones. Que sube PODEMOS, a Pedro Sánchez no le importa, aunque le adelanten en votos pues sabe que Ciudadanos y PP le apoyaran, presionados por Europa que no quiere, ni en pintura, otro Tsipras multiplicado por cuatro y con coleta.
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