lunes, 28 de octubre de 2019

LOS SOCIOS INDEPENDENTISTAS DE SANCHEZ, DAN UN PASO ADELANTE.

Mientras Sanchez se dedicaba al trasvase de la momia de Franco, buscando torticera e indecentemente votos para su candidatura, la Generalitat de Cataluña, sin oposición ni siquiera dialéctica del gobierno socialista, ha bendecido y facilitado la reunión de partidos separatistas y el documento con que han sellado su reunión en la Llotja de Mar; donde se reunió el Consejo de Ministros en Barcelona el año pasado. Junto al vicepresidente catalán Pere Aragonès y al conseller de Políticas Digitales, Jordi Puigneró, la portavoz Laura Borrás y Arnaldo  Otegui (el hombre de paz de Zapatero), con otros representantes de los partidos nacionalistas catalanes, vascos, gallegos, baleares y valencianos han firmado este viernes en Barcelona una solemne declaración conjunta en la que reclaman un acuerdo político sobre la crisis catalana, la defensa del derecho a la "autodeterminación" y la liberación de los "presos políticos" catalanes. Entre estas formaciones están el BNG, la Crida Nacional, la CUP, EH Bildu, ERC, Esquerra Valenciana, MÉS per Mallorca y el PDECat, entre otros; si bien con la más que notable ausencia del PNV y Compromís.
Firmantes de la declaración
El paso adelante del delirio independentista, busca visibilidad (hoy la presidenta de ANC defiende la violencia como medio de darse a conocer en el exterior) y mediación internacional; dado que saben que la secesión no se puede culminar con la oposición del resto de españoles. Este delirio se lleva con el beneplácito, por omisión/dejadez, del PSOE de Sanchez que gobierna en muchas localidades y autonomías con su apoyo o ellos con el del PSOE: Navarra el PSOE con el apoyo indirecto de EH Bildu; Diputación de Barcelona con PDECat; en el Ayuntamiento de Barcelona gobierna Colau con el apoyo del PSC; MÉS per Mallorca ya formó parte del Ejecutivo de Armengol en la pasada legislatura, situación que se ha repetido en el nuevo mandato iniciado el pasado verano. .... y así en decenas de ayuntamientos, más de 40. Sin olvidarnos del gobierno Frankenstein que hizo presidente a Sanchez; que no quiere quemar los puentes porque sabe que necesitará sus votos tras el 10N. Pura picaresca y desfachatez.
Aquelarre separatista con la supuesta ayuda de los especialistas en la kale borroca.
A día de hoy, con una docena de encuestas publicadas, algunas con el traslado de los restos de Franco ya consumado, la proyección de escaños dan a Sanchez como el más votado pero no como ganador; pues él mismo rompió el acuerdo tácito del bipartidismo de que gobernase el candidato más votado. Efectivamente si no consigues sumar con otros partidos, puede ser que la situación de la que él es el padre fundador, no sea suficiente para gobernar. El "no es no" revolotea sobre las elecciones, como ya revoloteó tras el 28 de abril y la posterior pantomima del gobierno con la que buscaba nuevas elecciones para aumentar sus escaños; echando las culpas del fracaso de su propia elección, sobre Podemos y C´s . Pero conozcamos un poco mejor al personaje:

Frases que han hecho historia
En una entrevista, Albert Boadella le decía a Rosa Diez: – Sánchez me produce una doble sensación. El deseo feroz de no verle más me hace olvidar la realidad de unas encuestas terroríficas. Personalmente, me parece un psicópata. Alguien que no distingue entre el bien y el mal. No creo que todo sea mala fe en su actitud. Precisamente, mi temor es que actúa así de forma natural. El núcleo es su ego y solo se mueve en este círculo. Obviamente, ello significa un peligro público en un gobernante, pues en la función pública la vanidad ególatra conduce al desastre. No es difícil imaginar que en el contexto actual, Sánchez puede acabar con España en una sola legislatura. Quizás solo en un año. Por eso me aterrorizan las encuestas y espero con fruición que sean manipuladas.

Puigdemont esperaba reconocimiento exterior, pero su fracaso no ha sido el primero ni será el último. La obsesión de los nacionalistas catalanes por “internacionalizar el conflicto” ya quedó patente hace un siglo. Por extraño que parezca visto desde nuestros días, en 1919 los nacionalistas catalanes estaban convencidos de que, recién terminada la Primera Guerra Mundial, los Aliados vencedores obligarían a España a aceptar la independencia catalana o por lo menos un referéndum de autodeterminación. Lo explica el historiador nacionalista Josep Maria Poblet en su libro “La campanya autonomista de 1918-19”.



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