sábado, 6 de junio de 2020

EL GOBIERNO DEL DOCTOR JEKYLL Y MÍSTER HYDE.

Nos llegan continua y repetidamente vídeos de Pedro Sanchez de lo que decía antes de la moción de censura y lo que hace o dice después. Es como si la referida moción hubiese sido una poción que hubiese desdoblado la personalidad del personaje, sacando el lado malo que los psiquiatras dicen que todos llevamos. Pues bien, como todo está ya inventado, incluidas las mascarillas y los confinamientos anti peste en la Edad Media; aunque nuestro Presidente pretenda erigirse en su descubridor, me ha venido a la mente una película/novela que define muy bien esa lucha interna entre el bien y el mal y como una mala pócima o mala moción, puede trastocar el futuro comportamiento del afectado. El doctor Jekyll se prepara y toma una pócima que le transforma en Mister Hyde durante un tiempo, pasado el cual vuelve a ser Jekyll. Según va abusando de la poción, la permanencia de Hyde es mayor. Cuando descubre que Hyde es la maldad personificada, este personaje le domina. En nuestro personaje la pócima fue una moción de censura anti natura que en su primer intento llevó a sus compañeros a expulsarle de la Secretaría Genera. Doctor Sanchez se preparó mejor y tras un paso por el Doctor fausto, vendió su alma al diablo y volvió cual ave Fénix. Ganada la moción Frankenstein, su cambio dio paso a Míster Hyde. 


Es evidente que hablo de la Novela "El extraño caso del doctor Jekyll y míster Hyde", en la que el autor Stevenson, pretende describir un mundo real en el que el doctor Jekyll es un hombre alto y bien parecido, con unos modales exquisitos y una conducta intachable; nuestro Pedro Sanchez anterior a la poción/moción Frankenstein. Su otro yo, Mr. Hyde,  es bajito y repulsivo, carece de modales y su conducta es abominable, mi primera tentación fue pensar en Pablo Iglesias pero no, .a pesar de las apariencias, Jekyll y Hyde se tratan del mismo hombre. Claro que una licencia de autor me permite jugar con este doble personaje, llevando a unir a Sanchez-Hyde con Iglesias; al que la pócima del poder también ha trastocado, sacándolo de sus ideas del 15M para llevarlo al lado malo de la "casta". Hoy no cabe duda que Iglesia influye en Sanchez y comparten gobernanza como uno solo y se conjuran en sus almuerzos de los jueves. El matonismo compartido que hemos presenciado estos últimos días. La pócima ya afecta a Delcy Ábalos y a Marlaska de los Cobos. La maldad y el cinismo triunfan.
 


Cartel anunciador
¿Es razonable atribuir esta incongruencia al efecto de una poción nefasta? ¿No parece más atinado apuntar que el doctor Jekyll vive en la impostura, y Mr. Hyde en una brutal y desinhibida sinceridad?El doctor Jekyll siempre ha anhelado la admiración de todos, cultivando un comportamiento grave, solemne y honorable, pero su desmedida ansia de reconocimiento social ha corrido paralela a su profunda desazón interior, sufriendo por no estar a la altura de sus expectativas. Sus miras han sido tan elevadas que no ha conocido la indulgencia consigo mismo. Ese rigorismo ha desembocado en una dolorosa escisión interior. Su audaz experimento con la moción Frankenstein es la respuesta a ese conflicto, pues inicialmente le permite ser dos sin experimentar el estorbo de la conciencia. El doctor Jekyll cree que ha logrado resolver este problema, desdoblándose en dos identidades que pueden coexistir sin molestarse: “A pesar de mi profunda dualidad, no era en sentido alguno hipócrita, pues mis dos caras eran igualmente sinceras”. Perfectamente explicitado por su mayordomo, Carmen Calvo en nuestra versión, cuando reconoce que no es lo mismo Pedro Sanchez antes de ser Presidente, gracias a la moción, que después.


Henry Jekyll concluye que “el hombre no es solo uno, sino dos”. Stevenson esboza una teoría que había desarrollado Nietzsche, según el cual el mito de la identidad destruye la fecunda diversidad de la vida, adjudicando un solo rostro a cada hombre. Mr. Hyde no es una mezcla de bondad y perversidad, sino maldad en estado puro y sin un ápice de remordimiento por sus malas acciones. que sólo reconoce un principio directriz: “Lo que es bueno para mí, es bueno en sí”. Sanchez solo responde ante Sanchez y lo que es bueno para Sanchez, es bueno en sí (el espejito lo tendrá desgastado). Durante los 20 primeros meses de gobierno el Doctor Jekyll estuvo luchando por dominar a Hyde que ha ido ganando la batalla, como en la novela, pues ya no necesita la pócima para la transmutación. Hyde ha ganado y el doctor Jekyll ha muerto. 


En nuestro caso Míster Hyde se ha transmutado tanto en el mal que ahora es difícil disociarlo de su vicepresidente Pablo Iglesias, conclusión a la que han llegado varios especialistas universitarios "el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, concuerda básicamente con Sánchez sobre todo en sus características psicológicas, o más bien psicopatológicas". Llegando a aseverar que este tipo de personas tienen un ego descomunal que acarrea un trastorno mental con un sentido desmesurado de su propia importancia, y una carencia de empatía con los demás muy asentada. Más o menos les sucede que necesitan fundamentalmente el apoyo y la loa de sus alrededores y, cuando carecen de ésta, se muestran infelices porque se creen merecedores de ella. 



Frecuentemente -refieren los especialistas- son mitómanos, o sea, mantienen una clara tendencia a la mentira que puede a veces hacerse crónica, desorbitante, y convertirse en un trastorno permanente de sus actuaciones. Lo que según los psiquiatras y, desde los escritos de su colega alemán Kurt Schneider, muerto en 1967, se denomina científicamente “mal estático de la ideación”. ¿Les suena?. Pero insisten en que no se trata de un enfermo, sino de un individuo con esta muy singular forma de ser.


Es evidente que a Sánchez e Iglesias, le importamos un bledo, incluyendo su partido y el del resto. Las homilías durante el estado de alarma le han desnudado como lo que es. Un hombre con anchas espaldas y estrecha, estrechísima empatía. El desprecio prepotente del cierra la puerta al salir del vice, Pablo Iglesias, tambien le desnuda. Para salvar a la pareja de Pablo Iglesias, decir: "viva el 8 de marzo" con 27.000 muertos oficiales –más de 40.000 según los registros– y con la demostración de que ocultaron informes es toda una demostración de desfachatez, desprecio, prepotencia y mala fe. 

5 comentarios:

  1. ¿Y qué piensan ahora sus votantes, después de leer y ver todo lo que se dice en este enlace?
    ¡Una basura es lo que nos está gobernando!

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  2. Su irrefrenable ambición y su cinismo sin límites, le han llevado increíblemente a donde está, pero no sólo la culpa es de él, pues su partido PSOE, le respalda en bloque todas sus tropelías.

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  3. Esa es la pena y la única explicación es que el PSOE sanchista ha perdido la vergüenza. El viejo PSOE lo descabalgó pero no lo remató y resurgió de sus cenizas para vengarse de sus descabalgadores.

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  4. Otros 3 años que te quedan de aguantarlos. A mamar!!!!

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  5. Si solo tuviese que aguantarlos yo, no sería problema. Lo malo es que tienen que aguantarles muchos millones de españoles.

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