En estas fechas, de hace 100 años, se estaban celebrando los congresos nacionales para la elección de los comisionados para el 2º Congreso del Komintern (Internacional Comunista) que se celebraría en Moscú, entre el 19 de julio de 1920 y el 7 de agosto. Como representante de la CNT viajó nuestro protagonista, Ángel Pestaña. En este Segundo Congreso, la Internacional resolvió "luchar por todos los medios disponibles, incluida la fuerza armada, para el derrocamiento de la burguesía internacional y la creación de una república soviética internacional como un estadio de transición hacia la abolición completa del Estado. Desde el punto de vista político fue el Congreso en el que Lenín estuvo más inspirado. La Internacional Comunista se había fundado en el 1er Congreso que había tenido lugar en Moscú en marzo del año anterior, en plena guerra civil; por iniciativa de Lenin y el Partido Comunista de Rusia (bolchevique). Agrupaba a los partidos comunistas de distintos países, cuyo objetivo era luchar por la supresión del sistema capitalista, el establecimiento de la dictadura del proletariado y de la República Internacional de los Soviets, la completa abolición de las clases sociales y la realización del socialismo; como primer paso a la sociedad comunista y se recogía en sus primeros estatutos. El siguiente congreso, el 3º, sería nuevamente interesante para nosotros pues a él acudieron como delegados del PSOE Daniel Anguiano y Fernando de los Ríos Urruti; nombrados tras el congreso extraordinario de 1920. En el congreso de 1921 también se enviaron delegados de la CNT como Joaquín Maurín que había sustituido a Andreu Nin como secretario general.
Estos tres años, 1919, 20 y 21, se conocieron en España como trienio bolchevique, Centenario de este trienio, que está pasado sin pena ni gloria, salvo un artículo en el ABC sobre las dudas que hay sobre la muerte de otro notable anarquista, Buenaventura Durruti en 20N del 36 (mismo día que J. A. Primo de Rivera fusilado en la cárcel de Alicante). De este trienio, su primer hito coincide con la famosa Huelga de la Canadiense, que nos trajo la jornada de ocho horas. El 5 de febrero de 1919 se inicia la huelga en la Compañía de Fuerza e Irrigación del Ebro, conocida como La Canadiense; contra el despido de ocho trabajadores. Cuando los trabajadores se ponen en huelga y rechazan la oferta de la empresa de readmitirlos pero con un menor salario, la empresa despide a otros 117. Los trabajadores de La Canadiense no tenían organización ni experiencia sindical, pero con el apoyo de la CNT consiguen extender el conflicto hasta paralizar el 70% de las fábricas de Barcelona. Tras 44 días huelga se firma el acuerdo que constituyó un gran éxito del movimiento obrero español y de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) ,en particular pues se consiguieron: mejoras salariales, la readmisión de obreros despedidos, la liberación de miles de detenidos durante la huelga y la jornada laboral de ocho horas; convirtiendo a España en el primer país que promulgaba por ley esta reivindicación obrera. En 1919 se perdieron, sólo en Barcelona, 3,25 millones de jornadas de trabajo en huelgas que implicaron a 156.000 obreros. La represión militar y la actitud insolente de la burguesía catalana (la Lliga Regionalista), lejos de amedrentar el movimiento, lo espolea. Aparece simultáneamente la lucha armada entre anarquistas y el sindicato libre, con pistoleros pagados por la patronal. Tras la huelga, la CNT se situó como una de las fuerzas sociales más importantes de Cataluña y de España y por ello fue invitada de 2º nivel de importancia, entre 5 posibles a Moscú.
Centrémonos en ese 2º congreso en el que destacó nuestro Ángel Pestaña, que antes de llegar a Moscú pasó por París y se entrevistó con importantes sindicalistas y anarquistas del ámbito europeo. Pestaña tenía la enorme ventaja de hablar francés, idioma similar en comunicación al inglés actual. Nacido en 1887,Pestaña provenía de una familia muy pobre y desestructurada, comenzando a trabajar a los 11 años en las minas. Huérfano a los 14, trabaja en los ferrocarriles y durante los 15 siguientes anda por Francia y Argel donde aprende el oficio de relojero. Junto a Salvador Seguí (muerto por la patronal en 1923) y Juan Peiró se opuso a las acciones más exaltadas de la CNT y tras el Congreso de Zaragoza de 1922 consiguieron sacar a la CNT del Komintern. Antes Pestaña no pudo exponer sus conclusiones del viaje a Rusia de 1920, pués al volver de Moscú pasó por Italia para ver a Malatesta, siendo encarcelado hasta el verano del 22. Poco después de volver de Italia, resulta herido en un atentado de la patronal, herida que 15 años después, le llevó a la tumba.
Pero esto está en los libros de historia y no tendían más interés para mí si no fuera porque leyendo una biografía de Maurin sobre Ángel Pestaña, uno de mis anarquistas más querido y sobre el que ya escribí otro artículo, recordé las objeciones que hizo en el referido 2º Congreso del Komintern; en el que Ángel Pestaña fue elegido miembro del Comité del Congreso; participando en las comisiones y en las sesiones plenarias, gracias a su facilidad de palabra y su dominio del francés. Cuando se votó la resolución de las 21 condiciones de Ingreso en la Internacional Comunista, Pestaña se abstuvo diciendo que “la CNT es apolítica” esta y otras intervenciones contrarias al partido comunista, motivó que sus organizadores le propusieran reunirse con Lenín en su despacho del Kremlin, En la penúltima sesión del Congreso aprovechando el intermedio de una traducción, Pestaña se acercó a Lenin para despedirse de él, pero si sus interlocutores esperaban impresionarle, la verdad es que Ángel no tuvo inconveniente en decirle al mismísimo Lenín sus verdades y que resumiré: A la pregunta de Lenín sobre que le estaba pareciendo el desarrollo del congreso y sus debates, Pestaña le contestó que los discursos y trabajos presentados eran espléndidos pero que lo que le había decepcionado era comprobar que una cosa era hablar y otra predicar con el ejemplo pues la mayoría de los congresistas, una vez que salían del Congreso e iban a sus hoteles, se daban unas comidas pantagruélicas en mitad de un Moscú arruinado por la guerra y algunos invitaban a comer a las hambrientas jóvenes rusas para cobrárselo en la cama. Al final de las sesiones, firmó al lado de Lenin, Trotsky, Zinóviev y Bujarin, el manifiesto que el Congreso dirigió a los trabajadores de todo el mundo. Vaya nivel de mi querido y honrado anarquista.
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| Ángel Pestaña en una de sus últimas intervenciones en el Congreso reunido en Valencia en diciembre de 1937 |
Separo a Pablo Manuel Iglesias Turrión del viejo Pablo Iglesias Posse, que viendo el cariz que tomaba el Komintern y las presiones que recibía para incorporarse a él envió a los antes nombrados Daniel Anguiano y Fernando de los Ríos al 3er Congreso. A la vuelta, el informe negativo de este último terminó por decidir al viejo socialista a mantenerse fuera de la Internacional Comunista. De los Ríos, escribió un pequeño libro, "Mi viaje a la Rusia soviética" en el que contaba su viaje y observaciones. El pasaje más conocido de este libro es cuando preguntado por cual era el momento en el que pensaba conceder más libertad a la sociedad Lenin emprendió una larga y tortuosa respuesta rematada al final con un lacónico: “¿La libertad para qué?”. Adjunto un enlace al libro porque leerlo es sumamente agradable y hace una descripción detallada de lo que encontró y de como le sorprendió la afición al teatro de los moscovitas y la admiración que sentían por León Trotsky, muy superior al éxito de los discursos del propio Lenín.
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| Delegados del 3er Congreso con Lenín en el centro y Fernando de los Ríos a su derecha |
Nuestro Pablenin y su asociado Sanchez que cada día deriva más hacia el comunismo, emulan al original y lo acaban de demostrar ¿La libertad para qué?. Sánchez y sus cómplices intentan amordazarnos y perpetuarse en el poder silenciándonos. El pasado lunes trataron del impacto de las declaraciones del general José Manuel Santiago, que aseguró que trabajaba para «minimizar» las críticas al Gobierno. El líder de Podemos exigió a Sánchez seguir por el camino de la censura para cortar de raíz los mensajes negativos y el jefe del Ejecutivo accedió; con la ayuda entregada de Marlaska , también volcado en un ultraizquierdismo sorprendente antes de la moción de censura, que junto a otros colegas de su Gobierno, caminan directamente al cambio de régimen. España resistirá, porque no le queda otra, pero la democracia que nos ampara está seriamente amenazada.
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| Pablenin. |
Los magníficos anarquistas, luchadores libertarios y soñadores de una utopía, fueron siempre enemigos de los comunistas, que tampoco se llevaban bien con los socialistas. Stalin persiguió a sus oponentes hasta que los exterminaba. En nuestra G.C., los comunistas eliminaron al POUM, en mayo del 37, y a su fundador Andreu Nin; el otro fundador, Joaquin Maurín, se libró porque estuvo preso toda la referida G.C. En febrero del 39, socialistas y anarquistas se levantaron contra Juan Negrín y su apoyo comunista. Nunca en España, hasta ahora y creo que tampoco en países occidentales, salvo Islandia y Finlandia, socialistas y comunistas nunca habían gobernado en coalición; salvo en la Rusia de 1917 con Kerensky, hasta que tras el golpe de estado, Lenín tomó el poder para los soviet. Golpe de Estado seguido de una cruenta guerra civil
Sorprendentemente a la muerte de Lenín, le sustituye no el admirado Trotsky sino el astuto y sanguinario Stalin que fue eliminando a quienes le podían hacer sombra; labor terminada en 1940 con el asesinato de Trotsky en Méjico a manos del catalán Ramón Mercader, que previamente le engañó para acceder a su círculo más íntimo. Siempre recuerdo como el viejo Trotsky enamoró a Frida Kahlo cuando fue acogido en su casa hasta que el marido de esta, el gran pintor mejicano, Diego Ribera, se enteró y le puso de patitas en la calle.
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| Lenín en el Instituto Smolny dando instrucciones a la Guardia Roja para el asalto al Parlamento. |
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| Frida Kahlo con León Trotsky |
Cada día Pablo Manuel Iglesias Turrión, Pablenin, consigue del socialista Pedro Sanchez, lo que evitaron Pablo Iglesias Posse, Felipe Gonzalez, Rodriguez Zapatero, Alfonso Guerra, Rubalcaba,... Curiosamente como regalo por el 150 aniversario del nacimiento de Lenín, el 22 de abril de 1870.
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