lunes, 25 de mayo de 2020

QUIEN SE MUEVE NO SALE EN LA FOTO. LA DICTADURA DEL GOBIERNO,

“El trío de la bencina” fue una popular comedia alemana, estrenada en 1930, Desde entonces la frase se suele utilizar cuando tres personas aparecen en franca compañía intentando llevar adelante algo en común. Viene toda esta introducción a cuento del trío formado por quienes dirigen la política de este país. Mientras da mimos a los de Inés Arrimadas y a los de Andoni Ortuzar, en un despacho cercano al suyo, la vicepresidenta, Carmen Calvo, sigue tendiendo puentes con ERC e incluso con Junts per Catalunya.

El trío de la bencina
Lo único que se le escapó a Redondo, esta semana, fue el acuerdo tripartito con Bildu. Aunque estaba al corriente, ya que se comentó en la reunión de ese lunes del núcleo duro de la coalición, no conocía los términos del pacto que firmó la portavoz socialista, Adriana Lastra. Tras el rechazo frontal de la vicepresidenta tercera, Nadia Calviño, minutos después de hacerse público, Redondo decidió que la mejor forma de salir del paso era culpar al PP por dejar tirado al Gobierno. Esa misma noche Pedro Sánchez les trasladó el argumentario a sus ministros y dirigentes del PSOE, que repitieron al unísono.
La cara de la vergüenza, si la tuvieran.
La táctica sigue el mismo patrón que con el PSOE, comprar fidelidades y al que se mueva no sale en la foto. El último el coronel de la G.C. Pérez de los Cobos y así mientras las nóminas de los altos cargos y ‘dedazos’ del Gobierno socialcomunista de PSOE y Podemos supusieron para las arcas públicas un gasto de 18 (12 a altos cargos y 6 a eventuales) millones en marzo, el peor mes de la historia del paro y cuando 302.265 personas perdieron su trabajo por la crisis pandémica del coronavirus. , el coronel que pretendía ser fiel a su juramento, ha sido defenestrado sin previo aviso, como antes lo fue el abogado del Estado que no quería pedir una rebaja en la calificación del golpe de estado de Puigdemont, Junqueras,...

A los fieles, ni tocarlos, Adriana Lastra en cualquier otro partido democrático habría sido despedida y aquí sigue. El doctor Fernando Simón será elevado a los altares como la ex ministra Carmen Montó. Roma no paga traidores pero a los fieles los enriquece. Para Sanchez, la política es el paradigma del deshonor y le da igual pactar con Bildu después de negarlo 15 veces que comer todos los jueves con aquél que no le iba a dejar dormir ni a él ni al 95% de los españoles, que es bastante peor. Hace una semana no había plan B para la desescalada y ahora reparte ilusiones de salir del Estado de Alarma rápidamente; claro que teniendo en cuenta el valor de la palabra de Sanchez...; lo cual tratándose del Presidente del Gobierno...
Lo del honor, no va con ellos. ¡Que pena de España en que manos está!
En este personaje todo es teatro e impostura, basta con verle en sus charlas de Aló Presidente, que lo que buscan es aparecer como nuestro padrecito que se interesa por nuestro bien y como somos irresponsables pues tiene que mantenernos confinados y aprovechar el Síndrome de Stockolmo para que cuando graciosamente nos libere, estemos tan agradecidos que olvidemos su desastrosa gestión que nos ha ocasionado 40.000 fallecidos y se habrían evitado mayoritariamente con mascarillas para la población de riesgo, evitar concentraciones a partir del 28 de febrero y haber confinado a los mayores de 60 años, dejando a la economía productiva que mantuviese su dinámica. 

En lugar de eso, la muerte y ahora el desastre económico por aquellos que no estan capacitados para sacarnos de esta situación que ellos mismos han propiciado por su negligente prepotencia, que les lleva a valorarse con un siete y a decir que saldremos más reforzados, el colmo de la desfachatez , cuando de esta pandemia lo que sale es un país dolorido, acobardado y deteriorado; un país empobrecido que ahora se enfrenta a una brutal recesión y ojala este coronavirus actúe como los anteriores, SARS en 2002 y MERS en 2012 que según vinieron se fueros sin despedirse hasta dentro de otros 10 años; como vienen haciendo desde mediados de los sesenta del pasado siglo.

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