Leía que la ministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, había avanzado el pasado 27, en el Foro ABC del Agua que este mes de julio «comienzan los contactos con todos los sectores implicados para poner sobre la mesa los problemas y soluciones» a la gestión de los recursos hídricos, en el marco de un Pacto Nacional del Agua y me ha venido a la mente alguien que participó decididamente en la anulación del PHN, aprobado en 2001 por el gobierno de Aznar. Efectivamente la misma Cristina Narbona que ha vuelto a la vida activa de la mano del peligrosísimo Pedro Sanchez. Pues sí, ya está dando muestras del odio al PP, odio que no diferencias programáticas o ideológicas, compartido con Pedro "Caballero" Sanchez. Odio que como es normal, ciega su intelecto y le hace meter la pata acusando de responsabilidades al PP, del incendio del entorno del Parque Natural de Doñana; por haber modificado, indebidamente, la Ley de Protección de Parques Naturales para favorecer la especulación urbanística. Mentira y gorda que le ha sido desmontada por el Consejero de Agricultura de la Junta y la propia Susana Diaz: "nadie, gracias a la Legislación Vigente, va a recalificar en los próximos 30 años, lo quemado". Previamente avanzó la negativa del PSOE a la CETA, en contra de lo que defendía su partido hasta el día anterior. Argumento: dudas sobre el cumplimiento de la protección medioambiental; dudando de Canadá, Alemania, Francia... y de los demás 26 países firmantes. Va a dejar al nivel del betún al que decía que la Tierra no era de nadie, solo del viento, su profesor. Con este dúo destructivo, el intento de la Ministra Tejerina, está condenado al más absoluto fracaso.
España está superando las duras secuelas del gobierno de J.L. Rodriguez Zapatero pero si cae bajo la influencia del dúo Narbona-Sanchez podría ser, unidos a Podemos, letal para nuestra unidad y al fin acabarse lo que Bismarck opinaba de España como nación indestructible. La visión/objetivo político de ambos es anular lo aprobado por el PP; ídem que el programa de Zapatero en las elecciones del 2004 y así nos ha ido con el Estatuto catalán y la Ley de Desmemoria Histórica. Mientras tanto Podemos acusa a Sanchez de enchufar a su hermano en Badajoz, ¿habría sido así con un Sanchez perdedor?
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| David Sanchez Castejón contratado por la Diputación de Badajoz |
La Ministra, García Tejerina, dice que intentará coordinar las diversas opiniones y neutralizar los egoísmos que las diversas autonomías tienen sobre el tema del agua. El momento es idóneo pues la sequía golpea con fuerza el Levante y la cuenca del Duero; principalmente. La Ministra comentaba, con razón, que en España hay agua suficiente pero está mal repartida y que de la generosidad de todos, tendría que surgir un proyecto que recondujera la situación y permitiera un mejor reparto de este bien escaso, pero suficiente si se gestiona correctamente. España no es un país con déficit hidrológico, la lluvia media está en 636mm, algo superior a Estonia (626) o Polonia (600) y ligeramente por debajo de Alemania (700). El problema es la distribución, pero es así y hay que afrontarlo y resolverlo. Por ello desde hace siglos en España se ha intentado paliar esa situación con obras hidráulicas diversas. Tampoco nuestra geografía nos ha dotado de ríos amplios y caudalosos que facilitasen la navegación y con ella la interconexión territorial. La España ilustrada del XVIII construyó gran parte del Canal de Castilla, uno de los proyectos más relevantes de ingeniería civil, y pensó en la construcción de canales navegables para desarrollar la economía, regar los campos y transportar mercancías de forma competitiva.
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| Esclusa del Canal de Castilla. |
La Dictadura de Primo de Rivera fue una época de gran impulso a las obras públicas en general e hidráulicas en particular; de ahí proceden las actuales Confederaciones Hidrográficas, muy novedoso concepto en su época. Este impulso fue recogido y continuado en la IIª República por su gran Ministro de Obras Públicas, Indalecio Prieto. En esos año destaca el Ingeniero de Caminos Manuel Lorenzo Pardo, que trabajo en la cuenca del Ebro desarrollando numerosos proyectos de embalses y regadíos, teórico de los grandes trasvases y que no pudo ver su Tajo Segura en funcionamiento. Tuve el placer de trabajar con su hijo, también Ingeniero de Caminos, fallecido prematuramente.
Durante los primeros años del franquismo y teniendo en cuenta los escasos recursos y la situación de penuria de la posguerra, el Ingeniero Manuel Pardo siguió desarrollando esa política hidráulica, seguida por el famoso Ministro de los pantanos, Silva Muñoz. La política de embalses, a los que debemos una menor dependencia energética y un abastecimiento de agua para riego y usos industriales, favoreció el desarrollo de los años 70/80. Los planes fueron tan amplios que aún se hicieron presas y canales en los años 90, dándome ocasión de construir cuatro grandes presas; como Jefe de Obra.
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| Presa del Boquerón en Cordobilla de Lácara; de mi curriculum |
El Plan Borrell, incluía las transferencias de agua entre cuencas y en su previsto trasvase del Ebro a Levante el volumen de agua a enviar, superaba al que, finalmente, fue aprobado durante el último gobierno del PP. El PP redujo en un 30% el volumen a trasvasar para apaciguar a Aragoneses y evitar la oposición de CiU; se basaba en reducir ciertos regadios que la Europa Comunitaria nos estaba solicitando. Este trasvase lo justificaba el Ministerio de Borrell, Narbona incluida, ya en 1993 dado que el Ebro disponía de excedentes suficientes anuales; el año que menos agua vierte el Ebro al mar es superior al doble de lo que se preveía trasvasar, unos 1100 hm3. Por tanto estos excedentes regulados con embalses hiperanuales eran susceptibles de ser trasvasados y podían contribuir a resolver las necesidades razonables de otras cuencas que no tienen recursos. Naturalmente con el informe positivo de nuestra Cristina Narbona.
Al llegar el PP al poder en 1996, retomó este asunto y para vencer reticencias, presentó una cifra inferior, unos 800 Hm3 (1/3 del excedente de un año seco) a trasvasar, que se completaba con algunas desaladoras de refuerzo puntual y con inversiones para mejorar las distribuciones existentes en conducciones enterradas o en canales que permitirían reducir las perdidas en las cuencas de recepción y su distribución. Por fin, el 30 de enero de 2001 el Gobierno del PP lograba sacar adelante el PHN, el primero después del aprobado en 1933 por Indalecio Prieto, por la abrumadora mayoría de 69 votos a favor y 15 en contra y con una quiebra importante en las filas socialistas. Aragón, Baleares y Asturias se opusieron y Andalucía se mostró reticente. La sorpresa la dieron otras dos comunidades socialistas, la extremeña de Ibarra y la castellanomanchega de Bono, a favor de que se debe trasvasar el agua que sobra y no desequilibrar y constreñir el futuro del Tajo que con unos embalses de cabecera que no llegan a alcanzar un 50% de su capacidad ni el los momentos óptimos. Los socialistas valencianos y murcianos también estaban a favor por motivos evidentes.
Las obras se comenzaron, incluso con un abastecimiento de urgencia a Barcelona capital, pero más tarde, cuando ERC y otros partidos nacionalistas minoritarios empezaron a tener las llaves de la gobernabilidad, con Zapatero de Presidente por accidente y Narbona de Ministra, empezaron los cambios de criterio, sobre todo en el PSOE y en CiU, que al principio apoyó el trasvase. La lucha por el voto, volvió a poner de moda lo de la «crispación y la coyuntura», de modo que CiU dio marcha atrás para apoyar la marcha atrás del PSOE en la derogación del trasvase del Ebro. Y así seguimos viendo como se pierden miles de Hm3 y los pueblos ribereños sufren inundaciones en invierno, mientras en la cuenca del Júcar y Segura no se alcanza el 40% ni en época invernal.
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| Embalse cabecera del Tajo |
Perdimos el dinero que aportaba Europa, varios miles de millones de euros, con los que habríamos ejecutado esta obra y minimizado el tremendo impacto del paro y mejorado las defensas frente a inundaciones que se producen con relativa frecuencia; en cambio no solo perdimos esa financiación sino que se pararon las obras iniciadas y se indemnizó por daños y perjuicios a las empresas que estaban realizando los trabajos. Sigue faltándonos la imprescindible visión de Estado necesaria para arreglar el sempiterno conflicto del agua y nos dispersamos en nuestros egoísmos provincianos.
Después llegó el colmo del disparate con Zapatero y su ministra Cristina Narbona, avivando la guerra del agua, creando insolidaridad que ahora no resolverá García Tejerina, con el dúo anti-PP, favorable a la España como nación de naciones. Vinieron los nuevos estatutos de Autonomía, en los que pudimos escuchar gritos insolidarios del tipo: «¡El Ebro es nuestro!», «¡el Tajo es nuestro!», «¡el Duero es nuestro!» y «¡el Guadalquivir es andaluz!». El Constitucional los rectificó y puso las cosas en su sitio el 14 de junio del 2011, y la salmuera, producto contaminante de desecho de las desaladoras, dio al traste con las 51 plantas sustitutivas del PHN, que se quedaron en 27, trabajando únicamente al 20 % de su capacidad, a causa del precio prohibitivo que tiene cada hectómetro cubico de agua desalada. Desaladoras con unos sobre costes no justificados y que el Tribunal de Cuentas, evalúa en el entorno de los 300 millones durante la etapa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en las desaladoras pertenecieron al Ministerio de Medio Ambiente, a cuyo frente estuvieron Cristina Narbona, Elena Espinosa y Rosa Aguilar.
Adjunto dos enlaces a artículos de Marisa Gallero en los que se detallan las dudas generadas por los sobrecostes de la más que inútiles desaladoras del tandem Zapatero-Narbona
http://www.abc.es/espana/abci-desaladora-fantasma-55-millones-euros-para-menos-9000-habitantes-201705020339_noticia.html
http://www.abc.es/espana/abci-seis-desaladoras-adjudicadas-psoe-tuvieron-sobrecoste-215-millones-201702270059_noticia.html
Se llegó a argumentar que era más lógico que aprovecháramos el agua del Ródano y en ese sentido hubo conversaciones en esa línea entre la ministra Isabel García Tejerina y la entonces ministra de Ecología, Desarrollo y Ecología de Francia, Segolén Royal. El Ródano sería el río que diera agua, mediante una tubería marítima, a precio competitivo a nuestro sediento Levante. Idea Forgiana y esperpéntica, que permitiría que alguien nos gritara cada día que la solidaridad francesa y europea están muy por encima de nuestras miserias patrias; eso sin olvidar el riesgo/espada de Damocles de dejar la parte más importante de nuestra agricultura en manos de una potencia extranjera; como si nunca nos hubiesen quemado y descargado camiones con fruta en la frontera.
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